La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) resolverá este miércoles si ejerce o no su facultad de atracción para revisar el amparo otorgado por un juez a Mario Aburto Martínez, asesino confeso del excandidato presidencial Luis Donaldo Colosio hace 30 años, con lo que podría salir de prisión el próximo 23 de marzo.
La Primera Sala de la Corte mantiene en lista -para discutir en su sesión de mañana- el recurso de reclamación interpuesto por la Fiscalía General de la República (FGR) contra la excarcelación del llamado “asesino solitario” del victimado candidato presidencial priista, el 23 de marzo de 1994 en Tijuana, Baja California.
En dicha sesión las y los ministros de la sala analizarán el proyecto de resolución elaborado sobre la demanda de la FGR por la ministra Margarita Ríos Farjat, luego de que la defensa de Aburto Martínez solicitara la intervención de la Corte para poder obtener su libertad, en los términos del amparo que le fue concedido.
Una posibilidad es que la mayoría de las y los ministros de la Sala se pronuncien por no atraer el caso y que éste sea regresado al tribunal de origen, lo que dejaría firme la sentencia a favor del amparo que permitiría a Mario Aburto quedar en libertad.
En su recurso de reclamación, la FGR demanda revocar el amparo otorgado al magnicida, por lo que el Pleno de la Sala deberá determinar si fue correcta o no la demanda de la fiscalía.
Hay que recordar que el 5 de octubre de 2023 el Primer Tribunal Colegiado Penal en el Estado de México ordenó aplicar a Aburto la pena por homicidio prevista en 1994 en el Código Penal de Baja California, que era de hasta 30 años de prisión, y no la del Código Penal Federal que se le impuso por 45 años.
Mario Aburto y su defensa denunciaron ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) supuestos actos de tortura en su contra desde que fue detenido aquel 23 de marzo en Lomas Taurinas, Tijuana, pero el pasado 26 de febrero, se dio a conocer en registro judiciales que la FGR autorizó el no ejercicio de la acción penal por los presuntos actos de tortura cometidos contra el asesino confeso.