Hablamos con Javier Herrera Valles, quien durante el Gobierno de Felipe Calderón fue coordinador regional de la Policía Federal Preventiva y, tras advertir al expresidente de la actuación irregular de su secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna, obtuvo como respuesta la persecución, tortura y encarcelamiento con imputaciones que más tarde se comprobaron que eran falsas.
Una de las fuentes de esas imputaciones fue Roberto López Nájera, alias Jennifer, cuyo nombre volvió a circular como testigo estelar de los señalamientos sobre un presunto financiamiento del Cártel de Sinaloa a la campaña presidencial del entonces candidato Andrés Manuel López Obrador en 2006.
Hoy, Herrera Valles recuerda quién es Roberto López Nájera.
“Roberto López Nájera trabajaba para la Barbie, él era su abogado, tuvo por ahí algunas diferencias con él y le mataron a un hermano, Roberto López Nájera, y él se acerca a la Embajada Americana en el 2008 para pedir hablar con alguien de la DEA, por ahí lo reciben a dar su testimonio de la Barbie y lo hacen testigo colaborador, las autoridades americanas se lo llevaron a Washington, posteriormente, fue donde empieza la operación limpieza y al dar su testimonio contra todos los implicados. En ese tiempo. Noé Ramírez que en ese tiempo que era Subprocurador de la SIEDO y toda su gente, entonces, hizo muchas declaraciones, pero implicando a gente de la Procuraduría General de la República, posteriormente ya lo utilizaron para hacer declaraciones contra más personas, como lo hicieron con el famoso pitufo. Porque antes del pitufo antes de que apareciera el pitufo, el testigo estrella era precisamente Jennifer, hacía declaraciones consulares allá en Washington y pues las tomaron de esa manera, obviamente sin sustento que se cayeron la mayoría”, comentó Javier Herrera Valles, excomisario de la extinta Policía Federal.
Herrera Valles nos comparte su lectura sobre la reaparición de Roberto López Nájera, conocido como Jennifer, desde su propia experiencia con el personaje y el uso que se dio a sus declaraciones como testigo protegido de la DEA.
“yo considero que como en mi caso, también aprovecharon para inmiscuir a López Obrador, al presidente. López Obrador en ese tiempo, y cosa que no funcionó porque no tenía los elementos de prueba que sustentarán esas declaraciones. No nada más es hacer declaraciones, sino que puedan concatenarlas con algunas otras pruebas Entonces definitivamente queda claro que si desestimaron esa investigación fue porque no hubo elementos que pudieran corroborar esas aseveraciones o declaraciones, esa es mi impresión, definitivamente. Porque en el caso de García Luna no nada más fueron declaraciones, sino que las concatenaron con algunos otros testimonios, con fechas, con datos, que lo hicieron creíble, entonces, así como se hizo una investigación desde ese tiempo contra Genaro García Luna, yo considero que también lo hicieron contra el presidente López Obrador en ese tiempo, y pues no quedó nada firme y optaron por desestimar, por cerrar esas investigaciones”, informó Javier Herrera Valles.
También le preguntamos sobre su conocimiento del rol que Genaro García Luna jugó durante administraciones anteriores a la de los dos gobiernos panistas y particularmente sobre sus funciones y participación en el caso Colosio que recién salieron a la luz pública.
Según Javier Herrera Valles era poco probable que, dada su jerarquía en aquel momento como subdirector del Cisen, Genaro García Luna hubiera podido tomar solo la decisión de rescatar en Tijuana a Jorge Antonio Sánchez Ortega, identificado por la Fiscalía General de la Republica como el presunto segundo tirador en el magnicidio de Colosio.
“Lo que pasa que éste no era un funcionario de alto nivel, era un subdirector que se ganó la confianza en ese tiempo de Jorge Tello Peón que era director del Cisen y de Wilfrido Robledo que fue su mentor, pero realmente no era una persona brillante, se prestaba para lo que indicarán, era una persona muy astuta, además de cargarles el maletín, supo llegar, hacer las cosas bien, agradarle los oídos, tanto te Tello Peón como de Wilfrido Robledo y obviamente se prestó para eso y huir. Porque acuérdate cuando se crea PFP, la Policía Federal Preventiva en 1999, Wilfrido Robledo lo trae a García Luna como coordinador de investigaciones que viene con toda la gente de Cisen y se queda en la división de investigaciones Por qué se crea la PFP con tres divisiones seguridad regional que era la Policía Federal de Caminos, Fuerzas Federal de Apoyo que vienen del Ejército, la Policía Militar y la Coordinación Investigaciones que viene del Cisen y de ahí se lo trae Wilfrido Robledo ya con cierto nivel”, Javier Herrera Valles.