La Fiscalía General de la República (FGR) notificó a la Secretaría de Defensa (Sedena) de las órdenes de aprehensión libradas contra 20 militares vinculados al caso de los 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa, desaparecidos entre el 26 y 27 de septiembre de 2014, en Iguala, Guerrero.
Lo anterior, de acuerdo con fuentes federales, para que la Secretaría procese la ubicación del personal implicado y sean puestos a disposición de la Policía Federal Ministerial.
La notificación se remitió al área jurídica de la Defensa, con el fin de identificar a las y los efectivos militares que estuvieron comisionados en Guerrero durante septiembre de 2014, cuando los normalistas fueron atacados, secuestrados y desaparecidos.
Es necesario decir que la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia concluyó que la llamada “Verdad histórica” en el caso de Ayotzinapa fue en realidad un “crimen del Estado”. En el informe detalla que el comandante de la zona 35 militar, general Alejandro Saavedra Hernández, fue uno de los enlaces operativos para desarrollar la investigación de los normalistas.
Asimismo, describe que en la noche de la desaparición de los normalistas, el 26 de septiembre de 2014, el coronel José Rodríguez Pérez, era el comandante del 27 Batallón de Infantería, en Iguala.
El documento también hace referencia a que, según algunas declaraciones de estudiantes lesionados, tras el ataque de sicarios y policías, el coronel estuvo al frente del personal militar que se dedicó a “fotografiarlos” al interior de una clínica en Iguala.
Por lo que toca al teniente de infantería, Francisco Macías Barbosa, del 27 Batallón de Infantería, era el mando inmediato del soldado Julio César López Patazolin, también desaparecido, y quien estaba infiltrado en la normal “Raúl Isidro Burgos”:
El juez segundo de Distrito de Procesos Penales federales en el Estado de México libró 83 órdenes de aprehensión, de las cuales 20 son contra mandos militares y persona de tropa del Ejército mexicano.