En la extensa cadena de corrupción institucional, donde figuran expresidentes, gobernadores, ex secretarios de Estado y un sinfín de exfuncionarios de todos los niveles, aparecen también los sindicatos, particularmente de las entidades públicas.
Uno de ellos tiene una deshonrosa mención honorífica: el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) y quien fuera su dirigente, sinónimo de corrupción y opacidad: Carlos Romero Deschamps.
Por 26 años, de 1993 a 2019, Deschamps dirigió este gremio, hasta el pasado 16 de octubre, cuando oficialmente dejó de ser trabajador activo de Petróleos Mexicanos (Pemex), así lo informó el Presidente López Obrador.
A partir del día de hoy, el señor Romero Deschamps ya presenta su renuncia, es decir, deja de trabajador activo de Pemex. Eso lo hace por voluntad propia y también por un exhorto que le hicimos”, comentó el mandatario.
Las casi tres décadas que duró al frente del sindicato y las tropelías que cometió Deschamps no hubieran sido posibles sin el amparo y cobijo de los ex presidentes priistas Carlos Salinas de Gortari y Ernesto Zedillo, y los panistas Vicente Fox y Felipe Calderón.
Escándalos
Y es que son amplios los escándalos de este oscuro personaje y de su familia.
Aquí mencionaremos algunos:
De 2013 a 2019, Carlos Romero Deschamps movió más de 115 millones de pesos en tres cuentas bancarias de Citibanamex, BBVA y el Laredo National Bank. difícil de explicar cuando su sueldo era de aproximadamente 1.5 millones de pesos al año.
En la contienda presidencial de 2000 que dio el triunfo a Vicente Fox, avaló el desvió de mil 500 millones de pesos del gremio a la campaña electoral del candidato priista, Francisco Labastida.
El caso se conoció como el Pemexgate.
Célebres fueron sus excesos, un yate bautizado como “El Indomable” navegó por los mares a costa del dinero de los mexicanos, posesión de Carlos Romero, quien presumía también departamentos en Cancún y Acapulco, con valor de 8 millones de dólares.
Su hija, Paulina Romero, gustaba exhibir en redes sociales su vida de socialité con cargo al erario y, recientemente, la investigación periodística “Pandora Papers” reveló que Alejandro Romero Durán, otro de sus hijos, utilizó una empresa fantasma, Steller Overseas Holdings, registrada en las islas vírgenes, para gestionar 10 inmuebles en México.
El líder petrolero defendió a capa y espada el origen de sus indebidas ganancias.
Así hablaba en marzo de 2015 ante el expresidente Peña Nieto y Emilio Lozoya, entonces director de Pemex, y Pedro Joaquín Coldwell, quien fuera secretario de Energía.
Hay quienes insisten en su visión supuestamente progresista en demeritar a los trabajadores petroleros argumentando que reducir su es indispensable para mejor el desempeño de Pemex, para su desencanto les podemos afirmar que no hay tales convenios para liquidar a miles de trabajadores petroleros’’, dijo entonces Carlos Romero Deschamps.
Con la llegada del nuevo gobierno, Romero Deschamps vio amenazado su imperio en el sindicato y una naciente disidencia empezó a tomar fuerza.
En febrero de 2019, fue denunciado por trabajadores en activo que conforman el “Movimiento evolución por un nuevo México” ante la Fiscalía General de la República (FGR) por delincuencia organizada, operaciones con recursos de procedencia ilícita, defraudación fiscal, fraude, enriquecimiento inexplicable y extorsión.
Hemos integrado un expediente robusto, señores, ustedes saben todo lo que hemos manejado en torno a estas denuncias, en torno a los dineros y propiedades, cuotas sindicales, dineros de contratos y las propiedades con las que contaba nuestro gremio petrolero’’, comentó Miguel Arturo Flores, líder del Movimiento Evolución por un Nuevo México.
Invitado por el Gobierno del Presidente López Obrador a jubilarse, el cerco se cierra para Romero Deschamps y su familia, aunque todavía se siente su influencia en el gremio.
En 10 de las pasadas 12 elecciones seccionales del sindicato petrolero solo se registró una planilla, todos, candidatos únicos afines al exdirigente, quien busca seguir dominando los dineros del sindicato.