Luego de que el 11 de enero se encontró el cuerpo de un bebé recién nacido en un bote de basura del Penal de San Miguel, en Puebla, la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX) inició una investigación para determinar si dicho cadáver fue sustraído de algún anfiteatro de la capital del país. Y es que Saskia Niño de Rivera, presidenta de la organización no gubernamental “Reinserta”, denunció en redes sociales que este bebé había sido robado en la Ciudad de México. Por ello, pidió a la fiscal capitalina, Ernestina Godoy, que investigue el posible robo de un menor de un hospital o morgue, que terminó en un basurero de Puebla. La fiscalía capitalina precisó que hasta el momento no se cuenta con alguna denuncia, por lo que ya trabaja conjuntamente con autoridades de Puebla para determinar el origen del cuerpo.