El Gobierno Federal intensificó este jueves las acciones de auxilio y recuperación en el sureste mexicano, luego del impacto provocado por el huracán Erick en los estados de Oaxaca y Guerrero.
La presidenta Claudia Sheinbaum, acompañada por el general Ricardo Trevilla Trejo, secretario de la Defensa Nacional, y titulares de la Secretaría de Gobernación, Marina, Bienestar, Conagua, SICT, IMSS Bienestar, Coordinación Nacional de Protección Civil y el gobernador de Oaxaca, supervisó personalmente las zonas afectadas y visitó la localidad de Corralero, municipio de Pinotepa Nacional, Oaxaca.
En Oaxaca, más de 9 mil elementos del Ejército Mexicano y la Guardia Nacional brindan apoyo en áreas afectadas, realizando trabajos de limpieza, desazolve de viviendas y despeje de caminos obstruidos por nueve derrumbes carreteros.
Autoridades informaron que en los albergues habilitados se otorga alojamiento, seguridad, alimentación y atención médica básica a más de 200 personas damnificadas.



Para fortalecer el apoyo logístico, la Fuerza Aérea Mexicana estableció un puente aéreo mediante el cual se han trasladado más de 2 mil 800 despensas y 8 mil litros de agua potable. Estos insumos están siendo distribuidos en las comunidades de Zapotalito, Corralero, Chacahua Grúa y Chacahua Isla, Oaxaca, consideradas entre las más afectadas por las intensas lluvias y vientos del ciclón.
Apoyo en Guerrero
En el estado de Guerrero, el despliegue de más de 11 mil efectivos del Ejército Mexicano y la Guardia Nacional ha permitido la entrega de 3 mil despensas y 12 mil litros de agua embotellada en el municipio de Pie de la Cuesta.
Asimismo, se ha proporcionado atención a mil 521 personas refugiadas en 29 albergues ubicados en los municipios de Coyuca de Benítez, Acapulco, Cruz Grande, Florencio Villareal, Marquelia, Copala y San Nicolás.
El Ejército Mexicano ha coordinado la distribución de raciones calientes y otros insumos básicos.