Ha pasado cerca de un siglo del surgimiento de los grupos porriles en las instituciones educativas de México, y las escenas de violencia no han cesado.
Se estima que estos conjuntos surgieron entre las décadas de 1920 y 1940, a partir de los grupos de animación deportiva, las porras, de ahí deriva su nombre.
“Pues ahí surgen los primeros grupos de jóvenes violentos que provenían de las colonias populares que rodeaban al barrio universitario y ya después en 1930 se crea el primer grupo de choque, que los alumnos pues le pusieron el apodo ese grupo de ‘los gorilas’ porque eran muchachos atléticos musculosos y muy violentos”, explicó Hugo Sánchez Garduño, profesor e investigador de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM.
Las autoridades universitarias aprovecharon el surgimiento de los porros para sus propios fines, por lo que comenzó el uso creciente de estos grupos para confrontar a otros.
También surgieron organismos similares en otros espacios educativos como el Instituto Politécnico Nacional, quienes mantuvieron una relación muy fuerte con el Partido Revolucionario Institucional (PRI).
“Nos pagaban los directores de la Universidad”: exlideresa porril
Esos grupos son tolerados y financiados por las propias autoridades universitarias y también por grupos políticos externos que de igual forma se sirven de ellos.
“Muchas veces nos pagaban los directores de la Universidad, no sólo de la prepa, rectores estamos hablando y también un diputado. Teníamos a un grupo que le denominamos los ‘diputables’. ‘Yo los invito a comer, coman, beban y nos llevaban al table más horrible que uno se pudiera imaginar. Pero mañana van a hacer esto, mañana van a tomar un Oxxo, mañana van a este a meterse a un Walmart’”, contó una ex lideresa del grupo porril “Bohemios Prepa 3”.
Los líderes reciben el pago, y el resto de los integrantes sólo reciben órdenes. Incluso el plantón colocado en Paseo de la Reforma en 2006 por Andrés Manuel López Obrador en protesta por un presunto fraude en la elección presidencial de ese año, fue blanco de los ataques de los porros.
“El campamento que está en reforma que pusieron y van a patear todas esas casitas de campaña. Ah, pues yo qué me gano tres playeras, no pues lo hubiera hecho hasta por una. Entonces yo le daba las playeras a los chicos o les daba lo que nos dieran cervezas y todo”, aseveró la ex lideresa del grupo porril “Bohemios Prepa 3”.
En 2018 los porros también se hicieron presentes
Y también en 2018, tras las elecciones en las que resultó ganador Andrés Manuel López Obrador, los porros se hicieron presentes.
“Faltaban dos meses para que tomara posición y aquí en la Rectoría llegaron tres grupos de choque a golpear a alumnos del CCH Azcapotzalco”, insistió el investigador de la UNAM, Hugo Sánchez Garduño.
El académico de la UNAM explicó que la presencia de esos grupos era un mensaje político para el Presidente electo, es decir los grupos que patrocinan a estos porros, en ese momento, seguramente eran del PRI o del PAN, y López Obrador les había ganado la elección.
Además de los grupos políticos, también hay cárteles del narcotráfico involucrados en su financiamiento.
Imanol Ordorika, investigador del Instituto de Investigaciones Económicas de la UNAM, aseveró que los cárteles están presentes, pues la mayoría de los grupos porriles son narcomenudistas.
Otorgarles boletos para los partidos de futbol es otra forma de financiamiento.
“Ya cuando voy escalando y todo, llego yo ya con autoridades grandes de la Universidad donde me dan 200 boletos para los partidos del Pumas y pues yo ya seleccionaba a mis amigos, vendía otros tantos. Me juntaba con otras personas y entonces es por eso, que yo llego a estar 10 años ahí, ya empieza tu carrera tu modelo de negocio”, añadió la ex lideresa del grupo porril “Bohemios Prepa 3”.
Liberan instalaciones del CCH Naucalpan tras 29 días tomado