Honorio es habitante de una comunidad dentro del municipio de El Mezquital, en Durando, el amor a sus raíces culturales lo han llevado a rescatar sus tradiciones y lenguas de su pueblo, el O’Dam.
“Para las y los que quieran conocer un poquito la lengua O’Dam, al maguey nosotros le llamamos mai, a las piedras le llamamos judai y también al agua, en nuestra lengua le llamamos tsurei y a cualquier árbol, nosotros le llamamos tuag”, declaró el Honorio Mendía Soto, Indígena O’dam.
La lengua O’Dam, al igual que los otros 67 grupos lingüísticos y 364 variantes reconocidas en México, se encuentra en alto riesgo de desaparecer. La migración en busca de mejores oportunidades sociales, la globalización tecnológica, y sobre todo, la discriminación racial, son algunas de las causas del descenso de hablantes.
“Lamentablemente sí ha habido una reducción muy drástica en el tema de los que aún hablamos nuestra lengua indígena y eso lo vimos mucho en el censo, hay una variación. En el 2015, por ejemplo, se hizo la encuesta intercensal y daba más o menos como 25 millones de los que nos consideramos como indígenas, pero luego sale el censo de 2020 y se reduce a siete millones los que todavía hablamos una lengua”, declaró Indígena O’dam.
De acuerdo con el Censo de Población y Vivienda 2020, el Inegi reportó que en México existen 23.2 millones de personas de tres años o más que se identifican como indígenas; de ellas, 11.9 millones son mujeres y 11.3 millones hombres; sin embargo, poco más de siete millones hablan alguna lengua y más de 16 millones dejaron de conversar en su lengua materna.
Los estados de Oaxaca, Chiapas, Yucatán y Guerrero es en donde se encuentra la mayor población hablante de alguna indígena en México y por el contrario, Zacatecas, Guanajuato, Aguascalientes, y Coahuila, es donde menos pobladores se comunican en lengua distinta al castellano.
“En Durango, por ejemplo, los que nos consideramos como indígenas, somos alrededor del ocho por ciento, pero si nos vamos a los que hablan todavía la lengua, se reduce como al tres por ciento más o menos”, expresó indígena O’dam.
Quienes viven a diario con este fenómeno social, explican el porqué se avanza en la extinción de las lenguas indígenas.
“Muchos de los jóvenes si nos estamos enfocando al fortalecimiento de la lengua, pero venimos arrastrando una historia en donde a nuestros padres, nuestros abuelos les inculcaron que si hablabas una lengua, si te identificabas como de una comunidad indígenas, sufrías discriminación, entonces muchos de nuestros abuelos les inculcaron a nuestros padres y nuestros padres a nosotros de que menor olvidáramos de que somos indígenas y también de nuestra lengua“, añadió Indígena O’dam.
“Muchas de las lenguas indígenas están en un proceso de silenciamiento, sobre todo en los sectores juveniles. Se habla de que una lengua desaparece o que está en altísimo riesgo, cuando las personas mayores ya no transmiten, ya no desarrollan el proceso de enseñanza de la lengua a los niños”, comentó la directora de Desarrollo Intercultural Bilingüe, Rocío Casariego.
Las lenguas que tienen más hablantes en México, de acuerdo con el Inegi, son náhuatl, maya, tseltal, sin embargo en su totalidad, los 68 grupos lingüísticos están en grave riesgo.
“Aproximadamente la mitad están en alto riesgo, pero se considera que todas están amenazas, incluyendo el náhuatl, el maya o las lenguas mayenses del país. En los últimos censos se ha visto una caída importante del número de hablantes, sobre todo jóvenes que ya no las están hablando”, declaró Casariego.
Lenguas como el mochó, que es una estructura mayense de origen oaxaqueño y que se llegó a hablar hasta en Centro América. Hoy tiene registrados 160 hablantes, o el chontal, son otros ejemplos del proceso de desaparición.
“Las lenguas en el norte, como kiliwa, el paipai, el cochimí, son lenguas que tienen un puñado de hablantes, en Oaxaca también tenemos en alto riesgo algunas lenguas como el Chontal de Oaxaca, hay una lengua muy diferente como es el Chontal de Tabasco, que es otra lengua que está en proceso de acelerado silenciamiento”, declaró Casariego.
La Unesco reconoce que a nivel mundial, existen alrededor de 6 mil 700 lenguas indígenas, de las cuales, 40% están en riesgo de desaparecer. Es por ello que se declaró en enero del 2022, el inicio del decenio internacional de las lenguas indígenas 2022-2023, para preservare, revitalizar, proteger y promover las lenguas originarias.
“Las hipótesis son de que en 100 años ya no habría lenguas indígenas en este país, en el proceso de 100 años pueden desaparecer todas las lenguas, aún siendo nosotros uno de los países más diversos, de otra manera, uno de los objetivos del decenio internacional es que al menos durante estos 10 años no desaparezca ni una sola lengua del planeta”, finalizó Casariego.
El reto crear círculos de lecturas, talleres o encuentros lingüísticos, que permitan reconocer y respetar las costumbres y derecho de las y los hablantes de alguna lengua indígena.