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Inmujeres urge garantizar los derechos de mujeres y niñas en Afganistán

El Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres) hizo un llamado urgente para que se protejan los derechos de las niñas y las mujeres de Afganistán tras el retorno del régimen talibán al poder.

 

La situación actual a la que se enfrenta Afganistán pone en peligro a su comunidad con especial énfasis en las mujeres y niñas. Por lo que es necesario hacer un llamado a garantizar y respetar los derechos humanos de todas y todos”, señaló la institución en un comunicado.

Inmujeres observa con preocupación lo acontecido durante los últimos días en Afganistán, en donde la crisis de autoridad pone en riesgo el derecho de las mujeres y las niñas a una vida libre de violencia, así como el disfrute y acceso a servicios y oportunidades.

 

Por ello, el Instituto retoma el llamado del secretario General de las Naciones Unidas a la comunidad internacional y el comunicado de los miembros del Consejo de Seguridad para garantizar que se respeten los derechos humanos y se protejan los derechos de las mujeres y niñas en Afganistán y que se establezca un nuevo gobierno unido, incluyente y representativo que contemple la participación plena, igualitaria y significativa de las mujeres”, indica el comunicado.

Por su parte, la Unión Europea (UE) y Estados Unidos se dijeron este miércoles “profundamente preocupados” por la situación de las mujeres en Afganistán e instaron a los talibanes a evitar discriminaciones y abusos y a garantizar sus derechos.

 

Estamos profundamente preocupados por las mujeres y las niñas de Afganistán, por su derecho a la educación, al trabajo y a la libertad de circulación. Pedimos a quienes ostentan el poder y a todas las autoridades afganas que garanticen su protección”, comentaron.

También manifestaron que la comunidad internacional está lista para asistir a las mujeres del país para que sus voces sean escuchadas.

 

Vigilaremos de cerca la forma en que cualquier futuro gobierno garantizará los derechos y las libertades que se han convertido en una parte inalienable de la vida de mujeres y niñas de Afganistán en los últimos 20 años”, indicaron.

Cuando los talibanes ostentaron el poder entre 1996 y 2001, las mujeres no podían salir de casa sin un acompañante masculino.

Tampoco podían trabajar y las niñas no iban a la escuela. 

Además, quienes eran acusadas de adulterio eran azotadas y lapidadas hasta la muerte.

 

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