La familia Ochoa y Placido ofreció el reconocimiento “Digna Ochoa” a defensores de los derechos humanos y periodistas que aportaron con su trabajo y acompañamiento el caso de la activista que fue asesinada el 19 de octubre de 2001. Estos reconocimientos forman parte de una serie de acciones para reivindicar la vida de la abogada y como un ejercicio de memoria para las nuevas generaciones.
Karla Michel Salas Ramírez, directora del Grupo de Acción por los Derechos Humanos y la justicia social, y una de las abogadas que dio acompañamiento al caso de Digna Ochoa, habló con once noticias sobre estas acciones.
Algo fundamental para la familia y los defensores de derechos humanos es que se reivindique la imagen de Digna, pues hubo un proceso por parte de las autoridades de descalificación a su trabajo y su persona, por eso era importante reivindicarla como defensora y como referente que fue para muchas generaciones más. En este marco se instauró el reconocimiento a personas defensoras de derechos humanos; esta primera entrega es un reconocimiento que se hace desde la familia Ochoa y Placido y desde Grupo de Acción por los Derechos Humanos y la Justicia Social que es la organización que acompaña a la familia Ochoa en su exigencia de verdad y justicia”, explicó la abogada.
Esta edición contempló a personas que durante los últimos 20 años han creído que fue un crimen el que se cometió contra Diga y han hecho lo posible por contar la verdad y sacar a la luz las diferentes contradicciones de la investigación.
Los galardonados fueron el licenciado Antonio Becerril, primer abogado del caso quien con su trabajo y estrategias aportó una serie de peritajes que acreditaban el crimen y presentó una defensa que para la época resultó innovadora; también la licenciada Pilar Noriega, una abogada y defensora de derechos humanos y amiga de Digna, quien ha insistido en que se investigue el asesinato, ella ha sido la voz que ayudo recuperar su memoria. Asimismo, diversos periodistas que contaron esta historia e insistieron en que la investigación del asesinato continúe y a los defensores de derechos humanos que acompañaron a la familia.
Esperamos que después de su aniversario se sigan realizando estos trabajos hasta que la sentencia sea remitida por la Corte interamericana de Derechos humanos lo cual consideramos podría ser en el mes de diciembre. Ya está la aceptación del Estado mexicano en su reconocimiento de irregularidades en la investigación, pero la resolución no ha sido emitida que, Y sin duda creemos que será emblemática, no sólo para la justicia contra los asesinatos de mujeres sino para quienes defienden derechos humanos”, mencionó Karla Michel Salas.
El primer paso a la justicia, según explicó la litigante internacional, es esta sentencia que reconoce las irregularidades de las autoridades de la investigación y que muestra una serie de deficiencias técnicas y manipulaciones de los dictámenes periciales para sostener la hipótesis del suicidio. También falta que a partir de la sentencia se integre un grupo especializado que pueda reiniciar esta investigación y permita agotar las líneas que vinculan el crimen, con el trabajo de la abogada y eso incumbe a los militares que la habían hostigado días antes de este homicidio.
El 19 de octubre de 2001 el cuero sin vida de una de las defensoras de derechos humanos más destacadas del país por su valentía y por su litigio a nivel nacional e internacional, fue encontrada en su despacho en la colonia Roma en Zacatecas 31.
Aunque el caso conmocionó a la opino pública y la sociedad mexica, las autoridades locales iniciaron una investigación en principio como homicidio, estableciendo claramente que la muerte estaba vinculada al trabajo que realizaba y al pasar de los meses la investigación fue desvirtuada y derivó en la tipificación de suicidio. La conclusión final de la procuradora capitalina fue que Digna Ochoa no sólo se suicidó, sino que había fabricado una escena para caracterizar ese suicidio como un crimen, algo que conocen como homicidio simulado.
Para llegar esta conclusión que en sí misma parece absurda se realizaron peritajes manipulados y se engendraron narrativas que cuestionaban el estado de salud mental de la abogada reconocida, centraron su conclusión en la estabilidad emocional y su vida personal todo esto con información difundida en los medios de comunicación”.
A los 19 años logramos que del caos llegara a la Corte interamericana de DDHH y la audiencia el estado mexicanos reconcomio su responsabilidad de manera parcial por las irregularidades de la investigación y se comprometió a reabrir el caos esto significa un triunfo porque no solo implica la responsabilidad, sino que es algo se había luchado desde hace 20 años que es la reapertura del caso y que se investigara como lo que es: un asesinato”, dijo