Emilio Lozoya Austin, exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex) durante el sexenio de Enrique Peña Nieto, es procesado por los delitos de lavado de dinero, asociación delictuosa y cohecho.
De acuerdo con las investigaciones de la Fiscalía General de la República (FGR), Emilio Lozoya recibió casi 13 millones de dólares en sobornos y casi 9.5 millones de dólares por entregar contratos millonarios a la firma brasileña Odebrecht.
Luis de Meneses, jefe de la constructora, declaró durante su juicio en Brasil que Lozoya pactó con Odebrecht para que se le entregaran 4 millones de dólares, que serían invertidos en las campañas del PRI en 2012. A cambio, la empresa sería favorecida con contratos públicos cuando Peña Nieto llegara al poder. Además, dijo, se negociaron otros 6 millones de dólares al concluir la contienda electoral.
El otro expediente de Lozoya es por la compra de una planta chatarra de fertilizantes; Agronitrogenados, valuada en 58 millones de dólares y por la que Pemex habría pagado 257 millones de dólares, es decir, más de cuatro veces su valor.
Por esta transacción Lozoya habría recibido 3.4 millones de dólares en sobornos, pero en ese caso, un juez determinó que quien debería reparar el daño era el dueño de la planta, Alonso Ancira.
La Interpol emitió ficha roja contra Emilio Lozoya
Por el caso Odebrecht, la estrella de impunidad de Lozoya dejó de brillar en mayo de 2019, con la llegada del nuevo Gobierno.
La Secretaría de la Función Pública lo inhabilitó 10 años por mentir en su declaración patrimonial, cuando fue girada una orden de aprehensión en su contra, pero ya había puesto tierra de por medio.
La Interpol emitió una ficha roja de localización y en febrero de 2020, el prófugo Lozoya fue detenido en Málaga, España. Cinco meses después, el 17 de julio de 2020, fue extraditado a México, pero no pisó la cárcel porque un juez le otorgo libertad condicional por el caso Odebrecht.
Lozoya se acogió a la figura de testigo colaborador y acusó de corrupción a los expresidentes Enrique Peña, su antiguo aliado; a Felipe Calderón y Carlos Salinas de Gortari.
Además, confesó el pago de sobornos a legisladores del PAN y del PRI para que, en el sexenio de Peña Nieto, aprobaran la Reforma Energética.
Por estos hechos fue aprehendido el exsenador panista Jorge Luis Lavalle, quien estuvo 18 meses preso.
Con sus declaraciones, Lozoya mantuvo la libertad con la condición de portar un brazalete electrónico que permitiera su localización. Ello no le impidió salir a cenar a restaurantes de lujo, como el Hunan, de Paseo de la Reforma, donde fue fotografiado en octubre de 2021.
El daño causado a Pemex por Lozoya fue de 200 millones de dólares
El 3 de noviembre de ese 2021, un juez le dictó prisión preventiva oficiosa, al acudir a una primera audiencia al Reclusorio Norte.
Entonces ofreció pagar 5 millones de dólares como reparación del daño, pero el presidente López Obrador recordó que el daño causado a Pemex superaba los 200 millones de dólares.
“¿Cuánto es? No es suficiente estoy hablando de 200 millones de dólares en el caso de Pemex, demanda que devuelvan dinero, que se recupere el dinero”, dijo Andrés Manuel López Obrador.
Este 20 de febrero el juez Juan Pedro Contreras Navarro, le dictó libertad procesal, al considerar que no existe riesgo de que se sustraiga de la acción de la justicia, pero olvidó que Lozoya fue aprehendido no en México, sino en España.
Emilio Lozoya sale del Reclusorio Norte