Nacional

Los crímenes de odio contra la comunidad Trans

Dayanne Scarlleth Bueno Salinas, de Nayarit, y Gala Ocampo, del estado de Morelos, fueron asesinadas con violencia y sus cuerpos abandonados en la vía pública. Hasta el momento, no se han imputado en las carpetas de investigación y se configuraron bajo los protocolos de feminicidio.

Kenya Cuevas es la directora de la Casa de las Muñecas Tiresias y Comisionada Federal por los Derechos Humanos de la comunidad trans. Su asociación civil está dedicada, entre muchas otras funciones, al acompañamiento de las familias y las víctimas de los transfeminicidios.

No tenemos representación en todo el país, pero en estos dos sí pudimos acercarnos porque tenemos coordinaciones en esas entidades. Es preocupante que sea el mismo modus operandi. Las asesinaron con arma de fuego, las extrajeron de su domicilio y abandonaron en otros lados. Esos son los crímenes de odio que se remarcan por su expresión de género contra la comunidad trans”.

Gala Ocampo vivía en Amacuzac, Morelos. Tenía 25 años y trabajaba en defensa de los derechos humanos de la comunidad LGBTTQI. El 17 de enero apareció asesinada por proyectiles de arma de fuego en el cruce de Cajones y Coahuixtla. Hasta el momento, se desconoce al transfeminicida. Sin embargo, la fiscalía de Morelos abrió una carpeta de investigación por feminicidio.

 En Morelos no hay una cifra oficial de los crímenes de odio, ya que en la ley no está establecido como un delito. Sin embargo, en los últimos meses se ha visto un alza impactante en estos crímenes”, se lee en el comunicado de la Casa de las Muñecas.

Dayanne Scarleth fue localizada en la colonia Zapopan sobre la calle Saturnino Peña. Trabajadorasexual por oficio y con un documental que se publicó el viernes 15 de enero, fue asesinada el 17 de enero. Según la prensa local señala, durante la madrugada publicó en sus redes sociales que su vida corría peligro.

La familia de Dayanne amaneció el domingo entre sirenas de ambulancia y líneas policiales para poder identificar a su hija que perdió la vida por fuertes golpes en la cabeza y el cuerpo.

La Casa de las Muñecas se acercó a las dos familias de las víctimas para brindarles un apoyo legal y las facilidades para agilizar los trámites burocráticos.

 

Esto quiere decir que Casa de las Muñecas Tiresias, a través del trabajo que hacemos desde muchos años, logramos coordinaciones con las fiscalías para atender estos casos inmediatamente. Esto debe suceder en todos los casos de transfeminicidio. Sin embargo, la intervención de Casa de Muñecas Tiresias es pedir justicia y el esclarecimiento de los hechos, (…) identificar el cuerpo y entregarlo a la familia. (Del mismo modo, nuestro objetivo es) tratar de reducir el trámite, que por lo general va de 24 a 36 horas. En este momento de duelo, la familia puede llevarlo de la manera más digna, después de vivir un suceso de violencia extrema”.

 

La Casa de las Muñecas Tiresias se fundó con la lucha de Kenya Cuevas por la justicia del caso Paola Buenrostro, una trabajadora sexual trans que fue asesinada en la calle Puente de Alvarado de la colonia Guerrero en la Ciudad de México el 30 de septiembre del 2016. A su asesino lo arrestaron con arma en mano y, aun así, el juez Gilberto Cervantes Hernández lo dejó  libre. Poco a poco fue convocando gente y movilizaciones, impresionantes por su fuerza y convicción en busca de justicia. Cuatro años después, ese crimen fue un parteaguas para que la comunidad mexicana volteara a ver la violencia que se ejerce sobre esta población.

 

Agradecemos a las fiscalías la disposición y coordinación para el bien de las víctimas y sus familiares. Esto es un reflejo claro de lo arduo que hemos trabajado en la Ciudad de México y esperamos que pronto tengamos una representación en todos los estados de la República para dejar claro que la mayor venganza de las mujeres trans es que seamos felices”, concluyó Kenya Cuevas.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Back to top button