Este 15 de mayo, el maestro Raymundo Rivero tiene otra razón para celebrar: cumplió medio siglo de vida dedicado a enseñar.
El profesor del Estado de México estuvo 30 años frente al grupo transmitiendo conocimiento y valores; y suma otros 20 como director escolar.
Con lágrimas en los ojos y voz entrecortada, reconoce que es un sueño hecho realidad.
“Mucha satisfacción de poder atender a tantos niños, ayudarlos, escucharlos y apoyarlos. Bastantes emociones, no pensé llegar a creer esto, se me hace un sueño porque si desde que era yo joven deseaba esto, pero no creí”, dijo el maestro Raymundo.
Lección de vida que surgió en las aulas.
Constante en su compromiso con la educación, el profesor ha dejado huella en sus alumnos.
“Estoy para atender a mi pueblo”, agregó.
Aunque admite que ya necesita un descanso, asegura que su vocación sigue intacta.
“Si yo volviera a nacer seguiría siendo lo mismo. Nada mas prepararme más para poder atenderlos de mejor manera”, añadió.
La profesora María de los Ángeles Sánchez también presume 52 años en el servicio educativo nacional.
Revela la fórmula que la mantiene con firmeza:
“Con un gran espíritu de servicio, mística, vocación y sobre todo compromiso”, señaló la maestra María de los Angeles.
Emocionada, agradece y también retribuye la confianza que los mexicanos han depositado en los docentes para educar a sus hijos.
“El magisterio tenemos un gran compromiso con la sociedad porque no estamos formando hombres del futuro sino del presente y de la futura sociedad mexicana”, comentó.
Enfocado a la formación cívica y ética durante 44 años de servicio, el maestro Juan Reyes, del estado de Morelos, destaca el momento histórico que vive el magisterio.
Nos están revalorizando, resaltó.
“Estamos nosotros reivindicándonos como unos verdaderos baluartes y la importante labor que desempeñamos ante la sociedad que es parte fundamental del desarrollo y del crecimiento de nuestro país”, indicó el maestro Juan Reyes.
La escuela, recuerdan los maestros, es un espacio seguro para la niñez en el que el profesor educa a los alumnos como a sus propios hijos.
” Uno debe enseñar con el ejemplo, que uno debe ser quien de la pauta para que los alumnos sigan el ejemplo de una”, dijo la maestra Sandra Luz Encarnación Morales.
Ellos, son mexicanos ejemplares, héroes anónimos, forjadores de generaciones que por su noble labor este 15 de mayo fueron reconocidos con las medallas Ignacio Manuel Altamirano por 40 años o más de servicio y Rafael Ramírez por tres décadas en la docencia.
“Para mí ha sido una gran satisfacción ser maestra. Si volviera a nacer, maestra volvería ser”, agregó María de los Ángeles.