Intensas sequías en nuestro país se registran en Nuevo León, Chihuahua, Coahuila, Sonora, Sinaloa, Baja California, Baja California Sur, Durango, Guanajuato, Querétaro y parte de Tamaulipas.
Algunos de los impactos iniciales por las altas temperaturas y las pocas precipitaciones se traducen en daño de la flora y fauna de los estados, seguido de afectaciones socioeconómicas.
Ante la ausencia de lluvias que han provocado desabasto de agua en las presas Cerro Prieto y La Boca, Nuevo León emitió en el primer mes del año, una Declaratoria de Emergencia por sequía en la entidad.
“Se suspenden todas las actividades que por su naturaleza ameriten el uso excesivo de agua. Se deberán realizar todas las acciones de carácter preventivo que eviten la operación de infraestructura hidráulica, para ayudar a mitigar los efectos de la falta de agua”, ordenó la declaratoria.
Por otro lado, de 13 municipios que comprenden la región sur de Chihuahua, al menos siete de ellos presentan sequía severa; asimismo, de los 67 municipios que conforman el estado más grande de la República Mexicana, más de 20 muestran la misma situación según lo informó la Comisión Nacional del Agua (Conagua) a través del Monitor de Sequía de México.
El informe también señala que las altas temperaturas se registran al tiempo que más de la mitad del territorio nacional presenta algún grado de sequía.
La falta de lluvias ha afectado también con rudeza a Coahuila, donde el próximo verano se esperan temperaturas por encima de los 45 grados de acuerdo con Abel de Luna Romo, subgerente de Ingeniería y Proyectos del Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento de Monclova.
El último informe del Monitor de Sequía de México mostró que al 30 de abril de 2022 el área con sequía de moderada a excepcional fue de 55.19% a nivel nacional, 1.94% mayor que lo cuantificado al 15 de abril del mismo año.
Estimulación de lluvias
A principios de abril, las secretarías de la Defensa Nacional y Agricultura pusieron en marcha la estimulación de lluvias para mitigar los efectos del desabasto de agua de la zona metropolitana de Monterrey, Nuevo León, y en el distrito de riego de Bajo Río Bravo, Tamaulipas.
El operativo, puesto en marcha por primera vez en México el año pasado, consiste en liberar, moléculas de yoduro de plata desde una aeronave sobre las nubes para propiciar la lluvia.
Durante los próximos 15 días se generaron las lluvias para proveer agua a las presas del estado y poder combatir los incendios que desde inicios de año han afectado 4 mil 300 hectáreas de la Sierra de Santiago, Nuevo León.
Desde la base aérea militar 14 de Apodaca, la Fuerza Aérea emprendió los vuelos mediante los cuales un equipo de técnicos realizó el operativo.