Con la premisa “Sororidad para todas”, la contingenta de mujeres con discapacidad se hizo presente en la marcha del 8m.
Decenas de mujeres con discapacidad visible o no, decidieron levantar la voz.
“Soy persona con discapacidad desde hace seis años, es mi primera vez participando en esta marcha del 8 de marzo, es un poquito difícil estar aquí, pero estamos apoyando a todas las mujeres nosotras las personas con discapacidad”, María Isabel Peña, mujer con discapacidad.
“Sobre todo el tema de movilidad es complicado, pero aquí estamos por las que no pudieron venir y por todas las demás”, Patricia Ortiz, mujer con discapacidad.
De acuerdo el Inegi son más de 11 millones en México, tan solo el 27.6% es económicamente activa, 8 de cada 10 es víctima de violencia, en gran medida de sus cuidadores.
Nosotras pasamos por este tipo de situaciones y discriminación y ya estamos hartas, estamos cansadas de que todo el tiempo sea igual, entonces venimos a buscar un cambio y buscar respeto.
Iniciativa que requirió de la unión y colaboración de diversos movimientos.
Desde abrir un grupo de WhatsApp, tener todos los teléfonos de emergencia de las chicas, saber de qué metro vienen y a qué metro se van, tiene una carga de logística fuerte, pero también es bien bonito el camino porque se va generando mucha hermandad”, Nubia Ramírez, coordinadora contingenta Mujeres con discapacidad.
Dos kilómetros de recorrido en silla de ruedas, guiadas con bastón… la energía de todas y una firme intención: no ser más las hermanas olvidadas.
