La participación activa de los ciudadanos en la toma de decisiones de carácter público que afectan a todas y a todos, como la consulta popular 2021, se le llama democracia participativa.
Busca lo que siempre estamos insistiendo desde muchos ámbitos que es que la democracia y el ejercicio de la misma no se termine el día de la elección. Esto puede ser a través de una consulta popular, de un referéndum, de un plebiscito”, mencionó Fabiola G. Franco, académica, Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, UNAM.
Este tipo de democracia proporciona a la ciudadanía una voz que el voto no le da, porque al votar en una elección, el poder recae en quienes son elegidos.
Con este tipo de democracia el pueblo va a tener una voz que antes no tenía. No hay otro poder que pueda llegar, más grande que el del poder ciudadano, de la democracia participativa, a tumbar lo que se decide ahí”, explicó Beatriz Aldaco, escritora.
Un sistema en el que México se encuentra un tanto rezagado, pero en el que busca avanzar a partir del 1° de agosto.
Creo yo que este ejercicio de la consulta popular que se va a realizar en agosto es un primer intento, o un primer acercamiento a explorar mecanismos de democracia directa o participativa”, señaló Felipe de la Oprofesor Métodos de Elección, UNAM.
Aunque pocos, sí ha habido ejercicios de democracia participativa en México, sobre todo a nivel local.
En el caso de nuestro país, tal vez lo más desarrollado sea la Ciudad de México, donde existen consultas, por ejemplo, el presupuesto participativo, para que los habitantes de una pequeña zona decidan en qué se va a gastar cierta parte del presupuesto”, detalló Javier Santiago Castillo, profesor investigador de UAM, ex consejero electoral, INE.
Una de las mayores ventajas de este tipo de democracia, es como su nombre lo indica, que promueve la participación ciudadana.
Aquí hay una gran oportunidad de aprovechar los beneficios de tener más mecanismos de participación, pero siempre que estos sean sensatos y acordes a los intereses ciudadanos, sobre todo”, mencionó Fabiola G. Franco, académica de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, UNAM.
Entre sus inconvenientes se encuentra, dicen los expertos, el riesgo de caer en el autoritarismo, a través de planteamientos sesgados.
Los grandes contras son los riesgos autoritarios, que las preguntas o los temas estén mal planteados, que haya desinformación o que haya campañas que busquen no sólo desinformar, sino a veces engañar sobre las consecuencias”, dijo Felipe de la O, profesor Métodos de Elección, UNAM.
La consulta popular, una de las principales herramientas de la democracia participativa en México es un derecho establecido en la Constitución desde 2012; en 2014 se expidió la Ley Reglamentaria, y en 2019 se realizó una reforma constitucional en la materia. Sin embargo, el primer ejercicio formal de consulta popular se realizará el primero de agosto, cuando se votará si se realizan, o no, procesos judiciales contra actores políticos del pasado, incluidos expresidentes.
Vamos a tener la primera prueba, vamos a ver si realmente a nivel federal va a haber una participación relevante”, mencionó Javier Santiago Castillo, profesor investigador, UAM, ex consejero electoral, INE.
Las y los expertos reconocen que hay factores que podrían limitar la concurrencia a las urnas en este ejercicio que, para ser vinculatorio, requiere la participación de al menos 40% de los ciudadanos inscritos en la lista nominal.
No se van a instalar el número de casillas que la propia ley establece, por una limitación de carácter presupuestal. La propaganda, la difusión de la consulta popular va a ser reducida, ante las limitaciones de recursos”, dijo Javier Santiago Castillo, profesor investigador, UAM, ex consejero electoral, INE.
En opinión de las y los expertos, es importante que la ciudadanía participe en la consulta.
Definitivamente cualquier ejercicio de democracia participativa tenemos que salir a votar”, concluyó Fabiola G. Franco, académica, Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, UNAM.
Antes de participar, Felipe de la O sugiere estar bien informados.
Invitaría a la ciudadanía sí a participar, pero antes a informarse, a conocer y a apropiarse del procedimiento”, dijo Felipe de la O, profesor Métodos de Elección, UNAM.
Sin importar el sentido del voto, el ejercicio podrá reflejar diversas posturas y permitirá que la ciudadanía exprese su opinión.
Creo que sí es importante porque hasta yendo a votar anulando el voto, es una postura, tanto los que voten a favor como los que voten en contra, es una postura y creo que sí es importante que se expresen las diversas posturas, que la ciudadanía exprese su opinión”, mencionó Javier Santiago Castillo, profesor investigador, UAM, ex consejero electoral, INE.
Aún si no se alcanza el porcentaje necesario, coinciden expertos, será un ejercicio democrático importante, que mostrará el poder ciudadano.
El ejercicio en sí mismo ya vale la pena, porque es una manera de empoderar a los ciudadanos, la gente va a entender, yendo a votar, que tiene un poder y que se pueden organizar y que eso puede tener resultados a su favor, es educación”, explicó Beatriz Aldaco, escritora.
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