En la frontera norte de nuestro país las maquilas nunca quedan en silencio, siempre hay manos laborando y en la primera línea de trabajo están las mujeres.
En Ciudad Juárez, Chihuahua, un municipio marcado por la violencia de género, cada día, ellas enfrentan diferentes agresiones.
“Hay abuso laboral, hay violencia sexual, acoso, violencia de género. El supervisor decía ‘quien quiera ganarse 500 pesos, pásele al baño’, o ‘¿tú quieres tiempo extra?, pues dame un beso’”, narró Yadira Cortés, hija de trabajadora de maquila e integrante de la organización Mesa de Mujeres.
Un estudio de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez reveló que el 56% de las trabajadoras de maquila ha sufrido hostigamiento psicológico o acoso persistente en su trabajo.
“Para faltar un día te descuentan casi la mitad de la semana, entonces estás ganando 2 mil 500 te van a descontar mil, te descuentan del bono de despensa, te descuentan de tu ahorro, descuentan el bono de puntualidad, el bono de asistencia”, contó Mónica Yesenia Álvarez, trabajadora en Ciudad Juárez.
Por su parte, Fabiola, una enfermera y extrabajadora de maquila, señala que ese trabajo desgasta la mente y el cuerpo. Contó que ha llegado a ver mujeres con problemas de espalda, rodillas y tobillos, hasta casos de quemaduras y amputaciones.
En Ciudad Juárez, las maquiladoras son el corazón de la economía local, ya que representan el 60% de los empleos formales de las más de 300 mil personas que trabajan en estas industrias. Alrededor del 52% son mujeres, cifra que revela la necesidad urgente de proteger sus derechos y garantizar entornos laborales libres de violencia, así como proteger los derechos de sus hijas e hijos.