Se acerca una de las festividades más importantes para Oaxaca: la Guelaguetza. A lo largo de 8 días, las 8 regiones se llenarán de júbilo, música y color, con una de las celebraciones más representativas de Oaxaca.
La relevancia de este evento es que aglomera ferias y fiestas en donde se expone la gastronomía, artesanías y diversas tradiciones de aquella entidad. Se inaugurará el próximo 25 de julio y culminará el 1 de agosto, luego de una suspensión de 2 años debido a la pandemia.
Después de dos años, la magia de la Guelaguetza vuelve a brillar.#Guelaguetza2022, te esperamos. ¡Tienes que vivirla! pic.twitter.com/CR6CBGQD8e
— Guelaguetza Oficial (@GuelaguetzaOf) July 6, 2022
Pero la relevancia de este festejo es que es un atractivo turístico nacional e internacional y una oportunidad económica para la entidad del sur.
Pero, ¿por qué se festeja la Guelaguetza?
La palabra Guelaguetza deriva del vocablo zapoteco guendalezaa y significa “ofrenda, presente, cumplimiento o cooperación”. La última definición hace referencia a un sistema colectivo en el que las personas cooperan para una fiesta y existe la obligación de la reciprocidad, es decir, “hay una obligación moral de que la persona que recibe lo devuelva en los mismo términos”.
La fiesta se celebra en relación con ese sistema cooperativo y se realiza durante los Lunes del Cerro, que es una celebración de la música, baile, comida y artesanías más representativas de las ocho regiones que conforman a la entidad.
Cuando finalizan, entre los asistentes se distribuye la Guelaguetza, formadas por objetos característicos de cada región, según señala la Secretaría de Turismo del Estado de Oaxaca.
Algunas fuentes señalan que tiene un origen prehispánico, dado que los pueblos originarios (principalmente mexicas que adoraban a diversas deidades, posteriormente zapotecos y mixtecos que habitaban en los valles) se reunían a las faldas del Daninayaaloani (Cerro de Bella Vista), actualmente Cerro del Fortín, para ofrendar y celebrar a la diosa del maíz, Centéotl (para los mexicas) y Xilonen (diosa del maíz maduro).
Sin embargo, el origen más preciso es en la época virreinal, ya que está relacionada con las fiestas a la Virgen del Carmen, cuya fecha de celebración (16 de julio) se hace los dos lunes más cercanos a la festividad católica de la advocación de esa virgen, también llamada Nuestra Señora del Carmen.
Fue la misión de los carmelitas que, en el siglo XVII y XVIII, erigieron su monasterio en las faldas del Cerro del Fortín y ahí comenzó la liturgia de la Virgen del Templo del Carmen Alto.
En el siglo XIX comenzó a designarse como Lunes de Cerro a la costumbre de ir al Cerro del Fortín, desde el primer lunes, y se repetía ocho días después en la llamada “octava”, luego de conmemorar a la Virgen. Era una celebración sincrética.
Sin embargo, fue en el siglo XX, se impulsó esta celebración en 1932, cuando Oaxaca cumplió el cuarto centenario de su elevación a rango de ciudad, por lo que se convocó a un programa especial para rendir homenaje a la ciudad con lo más destacado de las regiones. Ese evento se realizó en el cerro del Fortín.
En la actualidad, la Guelaguetza se lleva a cabo en el auditorio denominado bajo el mismo nombre, inaugurado en 1974. En este año, la celebración no se limita a la ciudad sino que se llevará a cabo en diversas partes del Valle Central de Oaxaca, así como en la Mixteca.