Han sido décadas de lucha con el único objetivo de lograr una participación equitativa en la vida pública y política en todo el mundo.
Es innegable el avance que ha logrado la mujer en la vida pública en el mundo entero; sin embargo, pese a los avances aún quedan muchos pendientes en la agenda política y México no es la excepción.
En la historia reciente son muchos los logros de las mujeres que han aspirado a trabajar en instituciones políticas en igualdad con los hombres. Desde la Primera Conferencia Mundial sobre la Mujer de la ONU, celebrada en México en 1975, en la que se exhortó a los gobiernos a crear las bases de una participación igualitaria de las mujeres en la política, ha pasado mucho tiempo.
Las mujeres han recorrido un largo camino de luchas, y lo siguen haciendo. Las décadas desde los años 70 hasta los 90 fueron decisivas porque generaron, a través de la propia reflexión sobre su situación en todos los ámbitos, movimientos de derechos de género y políticos en toda Latinoamérica.
Más tarde, en 1995, se celebró en Pekín la IV Conferencia Mundial sobre la Mujer, el programa más amplio sobre igualdad y empoderamiento de la mujer hasta la fecha. Según datos de ONU Mujeres, en ese año había un 11.3 % de mujeres en los parlamentos del mundo. En 2019, esa cifra ya alcanzaba un 24.3%. En junio de 2019, 11 mujeres eran jefas de Estado y 12 jefas de Gobierno, pero solo ocupaban el 20.7% de los cargos ministeriales en todo el mundo.
Hoy, la aspiración de liderazgo de las mujeres se topa frecuentemente con ambientes reacios. Y justamente por eso, el hecho de que en América Latina se hayan destacado mujeres presidentas no es un sobreentendido. En el siglo XXI, Michelle Bachelet fue la primera mujer elegida democráticamente como presidenta, en Chile, en 2006. Un año después, en 2007, los argentinos eligieron a Cristina Fernández de Kirchner para regir el destino del país. Más tarde, Laura Chinchilla fue presidenta de Costa Rica desde 2010 hasta 2014. Jeanine Áñez es presidenta interina de Bolivia desde el 12 de noviembre de 2019.
¿Se puede esperar que surjan otras presidentas latinoamericanas a mediano plazo?
Si se toma en cuenta la paridad de género, las democracias latinoamericanas aún no la reflejan, y eso lo dificultaría.
En la historia latinoamericana hubo ya algunas mujeres presidentas mucho antes de Bachelet, Fernández de Kirchner y Chinchilla: Isabel Martínez de Perón (1974-1976, Argentina, viuda de Juan Domingo Perón) y Lydia Gueiler (Bolivia, 1978-1979), ambas escogidas en procesos sin previa elección democrática, y derrocadas por golpes de Estado. Violeta Barrios de Chamorro, viuda del líder opositor asesinado (1990-1997, Nicaragua) fue electa constitucionalmente. También lo fueron Mireya Moscoso Rodríguez (1999-2004, Panamá), viuda de Arnulfo Arias, Ertha Pascal-Trouillot (1990-1991, Haití) y Rosalía Arteaga Serrano (Ecuador, 1997, quien fue presidenta solo por dos días). La lista incluye también a la presidenta guyanesa Janet Jagan (1997-1999), que sucedió a su esposo, Cheddi Jagan.
En 2020, Kamala Harris rompió otro techo de cristal y se convirtió en la primera vicepresidenta en la historia de Estados Unidos. Harris, hija de madre india y padre jamaicano, es la mujer que ha llegado más alto en el liderazgo del país.
En México
Griselda Álvarez, primera mujer gobernadora de la historia de México.
En un hecho sin precedentes en la historia de México, en 1979 Griselda Álvarez Ponce de León fue postulada para contener en las elecciones a la gubernatura del estado de Colima.
El día de las elecciones los colimenses demostraron madurez política otorgándole el triunfo a Griselda Álvarez, quien ganó la contienda con una ventaja de más de 50 mil votos frente a su principal competidor, el candidato Gabriel Salgado Aguilar, convirtiéndose así en la primera gobernadora de nuestro país.
Varias mujeres han intentado llegar a la máxima magistratura del país como: Rosario Ibarra de Piedra, Cecilia Soto, Marcela Lombardo, Patricia Mercado y Josefina Vázquez Mota con pocos resultados.
En 2021
De cara al proceso electoral que se avecina en el próximo mes de junio, el panorama político luce desproporcionado y la mujer aún busca más espacios en la vida política del país.
Actualmente solo dos mujeres encabezan gobiernos estatales. El caso de Sonora y la Ciudad de México, con Claudia Plavlovich y la doctora Claudia Sheinbaum Pardo respectivamente.
El camino para que una mujer llegue a la máxima magistratura del país luce un poco distante. Sin embargo, las elecciones de este 2021 podrían representar un trampolín para que esto se logre y así México se una a países como Chile, Costa Rica, Argentina, Brasil en la que una mujer dirigió los destinos de todo un país.