El secretario general de Gobierno del Estado de México, Ernesto Nemer señaló que el Gobierno mexiquense está levantando un censo para conocer el estado jurídico de las viviendas afectadas por el desprendimiento del cerro del Chiquihuite.
Es decir, saber si se trata de una propiedad privada o de un asentamiento irregular, determinar en qué condiciones están y, a partir de esos datos, tomar decisiones de apoyo en conjunto con el ayuntamiento de Tlalnepantla.
El funcionario señaló que el gobernador Alfredo Del Mazo Maza instruyó que, primero, se proteja la salud y la vida de la población y después, dar respuesta al tema de patrimonio de los afectados.
Una vez que se haya desalojado a la población, ante el riesgo de un nuevo desgajamiento del cerro y se lleve a cabo el censo, se tomarán las decisiones pertinentes.
Expuso que el Gobierno estatal garantiza que habrá una negociación con las familias de la zona siniestrada, de acuerdo con sus condiciones, para buscar las mejores alternativas.
Enfatizó que la búsqueda y ayuda a los afectados continúa en estos momentos, pero con cautela y responsabilidad para no generar más derrumbes en la zona, debido a las fracturas que está sufriendo el cerro.
Un trabajo técnico que va acompañado de un trabajo social y un trabajo económico”, mencionó.
Nemer Alvarez dijo que es necesario conocer la magnitud de los daños, mientras que las familias afectadas reciben apoyos alimentarios y albergue.
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