La reforma al Poder Judicial servirá para que el pueblo recupere la justicia y que sea el mismo pueblo quien tenga el poder de elegir a jueces, magistrados y ministros. Gracias a esto, se está viviendo una época histórica en el país, afirmó Arturo Ávila, diputado federal y vocero del Grupo Parlamentario de Morena en la Cámara de Diputados.
En entrevista con el Noti del Once, el diputado resaltó tres ejes estratégicos de dicha reforma, siendo la columna vertebral, la Austeridad Republicana.
“No puede haber Gobierno rico con pueblo pobre. Había ministros que ganaban casi 8 millones de pesos y dos mil 200 empleados del Poder Judicial que ganaban más que el Presidente de la República. López Obrador ya envió el mensaje de que estamos en un nuevo régimen, en un país distinto, que no quiere que los funcionarios tengan esos privilegios que no merecen”, enfatizó.
El segundo eje, mencionó, es resolver el conflicto de intereses, pues el Consejo de la Judicatura Federal (CJF), lo integran jueces, ministros, magistrados o incluso la presidenta de la Suprema Corte de la Justicia de la Nación (SCJN), quien era la encargada de sancionar o recibir las quejas de los propios jueces, ministros o magistrados.
Por lo anterior, el diputado expuso que ahora se está proponiendo la creación de un Tribunal de Justicia Disciplinaria que tenga autonomía, precisamente para sancionar a aquellos que no hagan de forma correcta su trabajo.
“También se va a quitar la parte del órgano administrativo, porque los jueces, los magistrados o los ministros no deben de administrar; sólo deben administrar la justicia, no los recursos”, añadió.
Y una de las victorias más importantes del Presidente, comentó el entrevistado, es que “le estamos regresando la justicia al pueblo, el poder económico. Los poderes del crimen estaban enquistados en el Poder Judicial, lo que estamos haciendo es decir: vámonos a la elección de jueces, vamos a democratizar la elección. Hay que darle el poder al pueblo”.
Aseguró que gracias a la reforma, los jueces se van a volver más visibles, pues ahora se sabrá quiénes son, de manera más abierta. Se podrá votar por ellos y decidir si hacen bien su trabajo o no; también si se quedan o si se van.
¿Qué sigue ahora?
El diputado Arturo Ávila manifestó que la reforma judicial no tiene precedente, por lo que está seguro de que será ejemplo todo el mundo, y que es muy probable que la repliquen en varios países.
Ahora bien, el siguiente paso es que la reforma se discuta en el Senado.
“En la Cámara Alta seguramente se aprobará; los estados también harán lo mismo. Se espera que la aprueban por lo menos 17 entidades, aunque estamos seguros que hasta serán más”, agregó.
Posteriormente dijo, se lanzará la convocatoria en 30 días y de ahí, se tendrán elecciones con toda seguridad el próximo año.
Los estudiantes y la falta de información
Sobre los estudiantes de Derechos que se manifestaron contra la reforma judicial, el legislador dijo que le dio la impresión de que tienen una influencia muy negativa.
“Yo soy abogado de profesión, y no tiene nada que ver lo que están postulando los jóvenes: de hecho salí a atenderlos ayer, les di mi teléfono para que me preguntaran lo que quisieran y me puse a sus órdenes… Hasta ahorita estoy esperando que me llamen”, narró.
Y continuó: “Su actitud me hace suponer que quizás detrás de ellos hay un interés distinto, y como no, si le estamos regresando al pueblo la justicia. Claro que hay resistencias, pero tenemos el respaldo del pueblo de México”.