Como parte de la estrategia nacional de seguridad, el Ejército Mexicano y la Guardia Nacional han desplegado 300 efectivos militares en los municipios de Tuxpan, Poza Rica y Tihuatlán, en el estado de Veracruz.
La acción tiene como objetivo principal inhibir la incidencia delictiva en esa región, reforzando el actual despliegue operativo de personal militar y fuerzas de seguridad pública en esas localidades.
La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) informó que a través de las comandancias de la Sexta Región Militar y la 19, se busca colaborar con las autoridades locales para revertir los índices delictivos y garantizar la libertad, el orden y la paz pública.
La presencia de estos efectivos también tiene como propósito permitir que la población realice sus actividades habituales con normalidad.
La Sedena afirmó que el personal militar actuará con firmeza, llevando a cabo tareas de disuasión, prevención, patrullajes, reconocimientos y establecimiento de puestos militares de seguridad. Todo ello se realizará conforme a lo establecido en la Ley Nacional sobre el Uso de la Fuerza y respetando en todo momento los derechos humanos de las personas.
La medida busca combatir la delincuencia organizada y generar un ambiente de tranquilidad para la población.