Relatores Especiales de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) enviaron solicitudes conjuntas a México, Francia y a Électricité de France (EDF), empresa transnacional de energía, para pedir información adicional sobre el curso del desarrollo del parque eólico Gunaa Sicarú, en la comunidad indígena zapoteca de Unión Hidalgo, en Oaxaca. La empresa enfrenta, desde octubre del año pasado, una denuncia civil, impulsada por pobladores de la región acompañados por organizaciones civiles como Proyecto de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, A.C. (ProDESC) y el European Center for Constitutional and Human Rights (ECCH), en un tribunal de París. La empresa francesa, asociada a los actos de su subsidiaria, Eólica de Oaxaca S.A.P.I de C.V, es acusada por no atender los estándares internacionales en materia de derechos humanos relacionados con el derecho a la consulta indígena libre, previa, informada y culturalmente adecuada. La acción legal demanda la suspensión del proyecto de parque eólico Gunaa Sicarú de EDF. La comunidad alega que no fue consultada adecuadamente en el proceso de la planificación desde 2015.
“La alegada interferencia de EDF en el proceso de consulta ha provocado una escalada de violencia en la comunidad, especialmente contra defensoras y defensores de los derechos humanos y del territorio”, señala ProDESC.Además, relatan que existe una creciente preocupación por el impacto en los derechos humanos de los parques eólicos a gran escala en la Unión Hidalgo, en Oaxaca, que han sido implementados sin considerar los impactos negativos a la población indígena. En ese marco, por primera vez, Relatores Especiales de la ONU han enviado solicitudes a la empresa EDF y a los Estados, mexicano y francés, para que se brinde información sobre los pasos tomados para adoptar una evaluación de impacto en materia de derechos humanos en el proyecto del parque eólico, así como para conocer las medidas para una consulta genuina con las comunidades afectadas para asegurar su consentimiento libre, previo e informado.
“El hecho de que cuatro relatores especiales de la ONU se reunieran para esta carta de denuncia conjunta es, por lo tanto, un fuerte indicio de la importancia y urgencia del caso Unión Hidalgo”, asegura la organización civil y pobladores.Enfatizan que el caso está ganando atención y genera preocupación internacional. Actualmente el caso se encuentra en la corte francesa, bajo la Ley de Deber de Vigilancia. Es así que exigen que la empresa “EDF respete, proteja y cumpla los derechos humanos de los pueblos zapotecas y adopte medidas para mitigar los efectos adversos de la construcción del parque eólico Gunaa Sicarú”, concluyen.