
A partir de esta semana y rumbo a la conclusión de funciones de los actuales ministros y ministras, así como la transición hacia la nueva integración del Poder Judicial de la Federación, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) solo atenderá asuntos urgentes.
Con base en el acuerdo aprobado por el Pleno de la Corte en marzo pasado, a partir del 16 de abril y hasta el 15 de agosto, únicamente los asuntos considerados de trámite urgente o considerados de trato preferente se turnarán a ponencia.
El resto de los asuntos que lleguen al alto tribunal, si se admiten mediante acuerdo presidencial, se reservará su turno para que los integrantes del nuevo Pleno de la Corte, que entrarán en funciones a partir del 1 de septiembre, determinen lo conducente.
De esta forma, y desde el miércoles de esta semana, la presidenta saliente del Máximo Tribunal, la ministra Norma Lucía Piña sólo turnará a ponencia los casos considerados como “urgentes”, es decir, juicios de amparo sobre derechos humanos y laborales, mientras el resto de los asuntos se archivará hasta que las y los nuevos ministros, asuman funciones.
Aun cuando ministras y ministros salientes reconocen que esta disposición aumentará el rezago en la resolución de asuntos en la Corte.
La reducción de actividades tiene su sustento en que, a partir de este abril, se iniciaron los trabajos para preparar la transición establecida en la reforma judicial.
Así, se tiene previsto que a partir de junio y hasta el 12 de agosto, el Pleno de la Corte solo sesionará los martes. Y en cuanto a las sesiones privadas, está abierta la posibilidad de que éstas puedan realizarse, incluso durante agosto.
Después de mayo, la Primera y Segunda salas solo sesionarán cada 15 días hasta el miércoles 13 de agosto.