En Tlahuelilpan, Hidalgo, se cumplen tres años de la explosión de un ducto de Petróleos Mexicanos (Pemex) que dejó 137 fallecidos y decenas de heridos. Desde las nueve de la mañana, familiares de las víctimas se reunieron para realizar una misa en la zona donde ocurrió la tragedia en su memoria. El 18 de enero de 2019 se reportó en el municipio de Tlahuelilpan, Hidalgo, una fuga en una toma clandestina por huachicoleo de un ducto de Pemex. Sin embargo, cientos de personas aprovecharon para recolectar la gasolina que se desperdiciaba. Fue a las 19 horas con 10 minutos, que se registró una fuerte explosión con personas aun extrayendo el combustible de la toma clandestina. Desde uu inicio, el gobierno de Andrés Manuel López Obrador anunció su estrategia para combatir el robo de combustible con el fin de detener un delito que, según el presidente, le costaba al país cerca de 3 mil millones de dólares al año en pérdidas para Pemex. Tras la explosión en Tlahuelilpan, el mandatario indicó que “si hay gente que roba combustible, es porque se le abandonó por completo y esto significa que no han tenido posibilidad de satisfacer sus necesitadas básicas, porque hay millones de pobres en el país”.