El Pleno del Senado de la República aprobó con 89 votos a favor y 16 en contra, que se emitan monedas de 10 pesos con materiales diferentes a las actuales.
La moneda de 10 pesos utilizará acero recubierto de níquel para fabricar su núcleo, sin alterar su diseño, tamaño ni características físicas.
Asimismo, con 91 votos a favor y 14 en contra, aprobó hacer lo mismo con las monedas de 20 pesos.
En el caso de la moneda genérica de 20 pesos, tendrá en su reverso el templo de Kukulkán, ubicado en Chichén Itzá, Yucatán, integrada por una aleación de bronce-aluminio en el arillo y aleación de alpaca plateada en el centro.

La medida busca disponer de materiales alternativos que disminuyan los costos de producción y garanticen la disponibilidad de insumos ante fluctuaciones en los precios de metales o nuevas técnicas de acuñación.
La Casa de Moneda de México será la encargada de realizar los ajustes técnicos para acuñar ambas monedas, mientras que el Banco de México será el responsable de sacar de circulación las monedas anteriores, de manera paulatina.
Los dictámenes aprobados fueron enviados al Ejecutivo Federal para su publicación.