En el área de Seguridad, el exgobernador Silvano Aureoles, dejó una herencia de sangre, corruptelas y excesos a costa de las arcas públicas de Michoacán.
Negocios millonarios con cuarteles de policía, algunos de ellos inservibles, renta de aeronaves para asuntos personales o el uso de helicópteros de policía para halagar a estrellas musicales, así como la firma de contratos con empresas presuntamente fantasma, son parte de su legado.
Hagamos un poco de historia.
Aureoles pago más de 5 mil millones de pesos por el arrendamiento y mantenimiento de 7 cuarteles de la Secretaría de Seguridad Pública a la empresa DYF S.A. de C.V. De acuerdo con el actual gobierno de Michoacán, el costo real por cuartel no rebasa los 50 millones de pesos.
Los complejos se ubican en Apatzingán, Lázaro Cárdenas, Coalcomán, Jiquilpan, Zitácuaro, Uruapan y Huetamo.
Y aquí saltan las irregularidades: en Uruapan el ayuntamiento donó el terreno para el cuartel, pero la administración de Silvano simuló su compra, en marzo de 2018.
Y dos días antes de concluir su mandato, el 28 de septiembre, autorizó un pago exprés de mil 760 millones de pesos a la empresa DYF.
Pero cuarteles como el de Lázaro Cárdenas están en completo deterioro, como lo afirmó al once el actual secretario de Seguridad Pública del estado.
Todo el cuartel, se construyó sobre una vaguada, una vaguada es donde confluye, dónde en caso de lluvia va a correr mucha por allí, entonces cada que se inunda, cada que llueve se inunda mucho el cuartel y particularmente se inunda el área que rodea el C5, es decir el C5 se queda como una pequeña isla sin poder accesar, entonces yo creo que fue mal planeada su construcción en ese lugar exclusivo”, dijo José Alfredo Ortega Reyes, secretario de Seguridad Pública de Michoacán.
Y cada quincena aparecen en la nómina de la corporación un ejército de aviadores.
Me encontré en nóminas con mucho personal que no existe que no está laborando y que lo hemos estado resolviendo finalmente reteniendo ese sueldo hasta que se presenten y si no está justificada su participación entonces se les está despidiendo”, dijo José Alfredo Ortega Reyes, secretario de Seguridad Pública de Michoacán.
Michoacán es una entidad en la que se disputan territorio el Cártel Jalisco Nueva Generación y Cárteles Unidos, una especie de federación que incluye a grupos criminales como Los Viagras, Los Caballeros Templarios y Los Blancos de Troya.
La administración de Silvano Aureoles dejó una cifra de 11 mil 150 asesinatos dolosos y una legión de desplazados.
Tan solo en Aguililla, se estima que 3 mil personas se vieron obligadas a abandonar sus hogares por la violencia.
Y en Morelia, los ciudadanos apenas curan las heridas de los Granadazos detonados en la plaza Melchor Ocampo el 15 de septiembre de 2008, que dejaron ocho muertos y 130 heridos.
Lejos de dedicar su atención a combatir el crimen, Silvano Aureoles rentó seis helicópteros y un avión a la empresa privada “B3 Fly Services”; arrendamientos por los que pagó mil 227 millones de pesos.
Y no se destinaron a tareas de seguridad, sino para uso exclusivamente personal de Silvano Aureoles, de su familia y amigos.
Estaban a disposición del gobierno del estado, bueno, del gobernador y digo estaban, en este momento por supuesto que no, pero estaban a disposición 6, 7 helicópteros diarios para las órdenes que diera el mandatario”, refirió Alfredo Ramírez Bedolla, gobernador de Michoacán.
Y también disponía de las naves de la policía para tareas ajenas a la seguridad pública.
En febrero de 2016 la cantante Belinda fue captada cuando descendía de un helicóptero oficial durante la visita del Papa Francisco a Morelia.
Aureoles apareció sonriente junto a la estrella del pop, en un asunto que fue investigado por la Unidad de Asuntos Internos de la Secretaría de Seguridad Pública de Michoacán, pero el exmandatario fue exonerado.
Aureoles también contrató a la empresa “Instituto Nacional para la Formación en Seguridad”, que capacitó a 170 policías estatales. Por lo cual se pagaron 21 millones 140 mil pesos.
Es decir, la capacitación de cada elemento costó 124 mil pesos, cuando cursos similares se ofrecen entre 20 y 25 mil pesos por agente.
Físicamente no existe copia del contrato y el domicilio de la firma, registrado en la Ciudad de México, está en duda, de acuerdo con el titular de Seguridad Pública de Michoacán.
Efectivamente se pagó un curso muy caro y cuando se empezó a checar el lugar la razón social finalmente no aparecía el domicilio”, mencionó José Alfredo Ortega Reyes, secretario de Seguridad Pública de Michoacán.
En realidad existe, se ubica en la colonia Prado Churubusco, en la demarcación Coyoacán, en una casa particular, sin letrero o rótulo de ninguna empresa.
Este miércoles, la Secretaría de Seguridad Pública de Michoacán informó que investigará los contratos con sobreprecio y el uso indebido de mobiliario oficial durante la gestión de Silvano Aureoles.
El cerco se cierra.