Como se ha podido leer en entregas anteriores, “Reforestación Cuautepec”, colectivo por el mejoramiento de Sierra de Guadalupe y El trabajo de los colectivos de Cuautepec: Los amigos del Árbol, en la Sierra de Guadalupe en la Sierra de Guadalupe converge el trabajo de distintos colectivos, compuestos por vecinos de Cuautepec, que se han organizado y han apoyado en las labores para propiciar la conservación del espacio.
Es así que el colectivo Nuestra Madre Naturaleza se ha organizado para apoyar principalmente con la reforestación, tal como lo hacen los colectivos de Amigos del Árbol y Reforestación Cuautepec, aunque también se han sumado como voluntarios para el combate de incendios.
Hasta el 2021, la Dirección de la Unidad Técnica Operativa del Programa Altépetl, contabilizó que en la Sierra habían 140 mil árboles, aproximadamente. Los datos de esta Unidad arrojaron que habitan 400 mil personas, en una extensión territorial de 2 400 hectáreas (ha). El suelo urbano abarca 1 480 ha. El Área Natural Protegida y el suelo urbano ocupan 920 ha.
Esto resulta fundamental, ya que hay una expansión del área verde gracias a los esfuerzos para la preservación de este espacio; sin embargo, la tarea continúa y las ganas se redoblan, tal como comparte la Unidad a Once Noticias.
Iván Rivera Lagunas, en conversación con Once Noticias, compartió que él es vecino de Cuautepec. Consideró que hay muchos problemas en la Sierra, pero el colectivo reconoce como principales: “la tala de árboles, la extracción de tierra, vienen a dejar aquí animales como gatos y se vuelven ferales lo cual a plantas, árboles y otros otros animales que son de aquí. ”Esto último es de gran importancia, porque también es uno de los problemas que identifica la Unidad Técnica Operativa:la invasión de animales domésticos.
Estos animales muchas veces son abandonados, tal como compartieron los brigadistas de la Unidad en convergencia con Iván:
Mucha gente ya no quiere a sus perros o gatos y los vienen a tirar a la Sierra. Es frecuente que encontremos perros amarrados a los árboles. Y aunque los soltemos se vuelve fauna feral y se comen a las especies endémicas. Yo rescaté a una perrita. Me la llevé y la tengo en casa. La habían dejado amarrada con un mecate a un árbol. La escuchaba llorar, como dos días, pero no daba con ella hasta que la encontré. La solté y se echó a correr. Al irme vi que iba tras de mí y decidí adoptarla. Ahora está bien contenta en la casa. Muchas veces los animales mueren de hambre y sed. Si los encontramos los soltamos, pero tenemos muchos ferales y eso afecta a la fauna de la Sierra, comentó José, brigadista de la Unidad Técnica Operativa del Programa Altépetl.
Durante la conversación, Iván también señaló que otra de las cosas que les preocupa es la seguridad en la Sierra de Guadalupe. Al respecto compartió que “llevamos mucho tiempo tratando de ver cosas sobre la seguridad. Somos varios colectivos los que hemos estado trabajando en esto, movidos también por ‘El Profe’.”
Iván considera que la seguridad, tanto para la gente de la Sierra como para los visitantes, es una de las cosas que más han pedido a las autoridades, “porque mucha gente sube a dañar el espacio. Suben a prender fuego, a tirar basura, a drogarse, en fin. No solamente están las cosas de los asaltos sino la extracción de tierra, la tira de cascajo. Son diferentes problemáticas las que existen en este lugar. Necesitamos que pongan seguridad, eso es fundamental, porque no basta uno o dos policías. Hay muchas entradas y la gente no respeta”.
Cabe destacar que el colectivo de Nuestra Madre Naturaleza nació por la preocupación de aportar a la Sierra:
Cuando éramos chicos íbamos ahí con los amigos, no estábamos enterados del trabajo que hacía ‘El profe’ sino hasta después. Yo comencé a trabajar con algunos compañeros hace algunos años a raíz de las contingencias ambientales. En lo personal lo que me movió fue la preocupación por mis hijos.
Más adelante, Iván señaló que:
A lo mejor no voy a cambiar el mundo, pero hago un poco de trabajo. La naturaleza siempre es sabia, nos junta. Vi una publicación en una página de Facebook en la cual convocan para hacer reforestaciones. Yo la verdad no sabía nada. Convocan a hacer reforestación, se hicieron algunas juntas, comenzamos a subir a la sierra y pues ya, dentro de la Sierra conocimos al profe Nacho. Nos fuimos empapando de su sabiduría. Para esos entonces, ya venían próximas las reforestaciones que se dan entre mayo y junio, depende de las lluvias, y empezamos a trabajar.
El colectivo de Nuestra Madre Naturaleza trabaja en las reforestaciones y ha puesto, por ejemplo, bebederos para aves. Iván comparte con una gran sonrisa que lo han hecho “pensando en la migración de aves. A veces las aves se van y difícilmente regresan. Y así se pierde mucha fauna también”.
En cuanto a los incendios, el colectivo se ha organizado de forma más unida a raíz de los incendios de marzo del 2020, considerado uno de los más devastadores. Al respecto Iván señaló que “últimamente comenzamos a conformarnos y a organizarnos en una red, para poder lograr más.” Junto con ‘El Profe’ han realizado algunos talleres para sofocar incendios “y hemos estado trabajando directamente en los incendios, mano a mano entre todos los compañeros. A veces aquí nos encontramos con los chavos, los ciclistas, también con los demás compañeros.”
Iván comentó en conclusión a Once Noticias que:
La Sierra de Guadalupe es para todos y necesitamos manos para trabajar, para subir agua, a veces en las reforestaciones que hacemos viene gente, pero a veces ya no regresa. Sólo algunos suben a tomarse una foto y jamás vuelven. Entonces, necesitamos gente que se quiera comprometer a trabajar.