NASA se adentra en la luna Ío de Júpiter
Se encontró evidencia de magma aún caliente, aún no solidificado, bajo la corteza enfriada de la luna de Júpiter.

Nuevos datos de la nave Juno de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio, más conocida como NASA, analizaron los fuertes vientos y ciclones de las regiones septentrionales de Júpiter y la actividad volcánica de su luna llamada Ío.
The three astronauts of the Shenzhou-19 crewed mission were all out of the return capsule on Wednesday afternoon, and the China Manned Space Agency (CMSA) declared the mission a success. pic.twitter.com/FD4yXfXq8V
— China Xinhua News (@XHNews) April 30, 2025
Los datos, presentados en la Asamblea General de la Unión Europea de Geociencias, han ayudado a desarrollar un nuevo modelo para comprender mejor la rápida corriente en chorro que rodea el polo norte de Júpiter y también revelaron, por primera vez, el perfil de temperatura del subsuelo de la luna Ío: una de las cuatro lunas galileanas de este planeta.
“Todo en Júpiter es extremo. El planeta alberga ciclones polares gigantescos, más grandes que Australia, intensas corrientes en chorro, el cuerpo más volcánico de nuestro Sistema Solar, la aurora más potente y los cinturones de radiación más intensos”, explicó Scott Bolton, investigador principal de Juno en el Southwest Research Institute (SwRI).
Si bien el radiómetro de microondas (MWR) de Juno fue diseñado para observar bajo las nubes de Júpiter, el equipo también enfocó el instrumento en la luna Ío, combinando sus datos con los del Mapeador de Auroras Infrarrojas Jovianas (JIRAM) para obtener información más detallada.
¿La luna de Júpiter tiene lava?
Al incorporar los datos del MWR con las imágenes infrarrojas de JIRAM se encontró evidencia de magma aún caliente en la luna Ío, aún no solidificada, bajo la corteza enfriada. En todas las latitudes y longitudes, se observaron flujos de lava en enfriamiento.
Los datos sugieren que aproximadamente 10 por ciento de la superficie de esta luna presenta restos de lava que se enfrían lentamente. El resultado podría ayudar a comprender cómo esta luna renueva su suelo tan rápidamente.
“Los volcanes, campos de lava y flujos de lava subterráneos de la luna de Júpiter actúan como el radiador de un coche, transfiriendo eficientemente el calor del interior a la superficie, enfriándose en el vacío del espacio”, explicó Brown.
Asimismo, el equipo también determinó que la erupción más enérgica en la historia de esta luna seguía expulsando lava y cenizas. Los científicos de la misión Juno consideraron que sigue activa hoy en día y esperan más observaciones, cuando la nave espacial de energía solar sobrevuele la ardiente luna.