
Una de las consecuencias que ha dejado la pandemia de COVID-19 es el rezago educativo debido al confinamiento y la necesidad de que los niños estudien a distancia desde sus casas. De hecho, este 2022 será el tercer año en el que millones de niñas y niños estudiarán si no confinados, sí de manera híbrida debido al COVID-19 que sigue causando estragos en todo el mundo, incluido México. La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) estiman que la generación actual de estudiantes podría perder 17 mil millones de dólares en ganancias a lo largo de su vida, como promedio global, debido al cierre de las escuelas y al shock económico generado por la pandemia. De acuerdo con el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), a nivel nacional se observa que, entre 2018 y 2020 el rezago educativo aumentó en 0.3 puntos porcentuales, pasando de 19% a 19.2%, respectivamente. Su más reciente reporte revela que en 2020, año cuando comenzó la pandemia en México, las tres entidades con mayor porcentaje de población con rezago educativo fueron Chiapas, Oaxaca y Michoacán, con niveles de 32.5%, 29.6% y 29.4%, respectivamente. En contraste, Ciudad de México registró un rezago de 9.5%, seguida por Estado de México con 14.1%. Javier Arroyo, cofundador de Smartick, dijo que ni los niños y niñas, así como los padres de familia y maestros estaban preparados para cambiar la forma de estudio a distancia.
“Ni los niños ni los padres de familia estaban preparados para los retos de la educación en línea, comenzando porque algunos no contaban con las herramientas necesarias para conectarse a clases, hubo mayor dificultad para entender las lecciones y para muchos fue casi imposible acercarse al profesor para resolver dudas. Ahora que las escuelas han abierto sus puertas de nuevo, el objetivo debe ser ayudar a los pequeños para que se pongan al corriente”, dijo el ejecutivo de la firma dedicada a la educación en línea.Además, Javier Arroyo compartió tres consejos que pueden ser de gran utilidad para que los niños salgan del rezago educativo que ha dejado la pandemia.