Petróleos Mexicanos (Pemex) toma oxígeno y mantiene el apoyo del Gobierno para 2022. Y es que, de acuerdo con el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) en 2022, Pemex -bajo la batuta de Octavio Romero-, recibirá un presupuesto de 636 mil 281 millones 92 mil 735 pesos, cifra que supone un incremento de 16.8%, con respecto de los 544 mil 598 millones que le fueron destinados en 2021. Asimismo, la partida presupuestal a la CFE -a cargo de Manuel Bartlett- el siguiente año asciende a 449 mil 997 millones 165 mil 429 pesos, lo que significa un aumento de 7.8%, con relación a los 417 mil 145 millones de este año. Petróleos Mexicanos (Pemex) toma oxígeno y mantiene el apoyo del Gobierno para 2022. Para 2022, espera una producción de crudo total de 1.82 millones de barriles diarios con un precio promedio de 55.1 dólares por barril. Aunque hay otro punto por el cual seguir la pista a Pemex, y es la compra de la mitad de Deer Park, donde se invirtieron 596 millones de dólares. Esta negociación sigue estancada. Según Curtis Smith, vocero de Royal Dutch Shell, el proceso quedó “paralizado” hasta que se concluyan las revisiones de seguridad realizadas por el Comité de Inversión Extranjera en Estados Unidos (CFIUS). Haciendo un recuento de esta negociación, hallamos que Pemex anunció en mayo de este año, la adquisición de 50% de la refinería. Una fábrica con sonadas demandas por el hecho de ser contaminante al usar energías “sucias”. En ese contexto, Fluvio Ruiz Alarcón, quien fungió como consejero independiente de este gigante energético en los sexenios de Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto opinó en principio que, “la compra de la otra mitad de Deer Park, no puede verse en forma aislada. Claramente forma parte del conjunto de proyectos de inversión y reformas legales que buscan garantizar la Seguridad Energética del país, por la vía de apuntalar la presencia de Pemex en el mercado nacional de combustibles, un complemento tanto de las reformas hechas a la Ley de Hidrocarburos en el pasado período ordinario del Congreso, como de los proyectos de rehabilitación de varias refinerías, reconfiguración de la refinería de Tula y construcción de la refinería de Dos Bocas”.
“De entrada, parece una buena idea adquirir a un precio que suena razonable al compararlo con transacciones similares, una refinería en la que se ha estado presente durante 28 años, en calidad de socio prácticamente paritario”, señaló el experto.Esta compra, agregó, se inscribe en el esfuerzo gubernamental para “alcanzar la autosuficiencia energética en bien de nuestra soberanía nacional”. Indicó asimismo que, como ocurre con cualquier proyecto, su éxito no está garantizado y requiere de un manejo cuidadoso de las circunstancias que lo rodean.
“Además, sigue siendo fundamental repensar el diseño institucional del sector petrolero, la importancia y formas de participación en el de nuestra empresa estatal, la mejor organización de ésta para enfrentar el reto de la sustentabilidad y la transición energética”.“Deer Park puede ofrecer valiosas ventajas a Pemex; por ejemplo, brindar la oportunidad de procesar allí mayores volúmenes de producción de crudo de Pemex y desplazar a los proveedores actuales, disminuyendo así la incertidumbre en términos de acceso al mercado de exportación”, indicó Adrián Duhalt, investigador del Instituto Baker de Políticas Públicas en la Universidad Rice en Texas. Esto quiere decir que, ante una decreciente demanda por el crudo pesado de México, conocido como Maya, Pemex estaría llenando un vacío en la demanda y ayudará a sostener un precio atractivo, señaló.