Se acerca fin de año. El contexto de pandemia ha develado el lado más oscuro de las enfermedades que antes pasaban inadvertidas o eran ignoradas. Una de ellas es el bornout, “síndrome de estar quemado” -en su traducción del inglés- o de agotamiento laboral, que ha sido reconocido por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como enfermedad, tras la ratificación de la revisión 11 de la Clasificación Estadística Internacional de Enfermedades y Problemas de Salud Conexos (CIE-11), aprobada en 2020 y cuya entrada en vigor será el próximo 1 de enero de 2022. Toma nota sobre este síndrome que está asociado al estrés laboral, para detectarlo a tiempo y atenderlo, y evitar otras patologías psíquicas.
¿Qué es el bornout?
Este trastorno se presenta en personas que padecen un alto estrés laboral y se caracteriza por un estado de agotamiento físico y emocional, despersonalización y una sensación de ineficacia y de no hacer adecuadamente las tareas. A ello se suma la pérdida de habilidades para la comunicación que se ha visto interrumpida, además, por la distancia física que prevalece en el contexto de la emergencia sanitaria. El síndrome se encuentra entre los principales problemas de salud mental y se considera la antesala de otras patologías como la depresión. El origen no está determinado pero las posibles causas están ligadas a las cargas exhaustivas de trabajo, como jornadas laborales extendidas, baja remuneración salarial, maltrato por parte de jefes/as o de compañeros/as, clima laboral de tensión y sobrecarga de trabajo.¿Cuáles son los síntomas?
Según datos de la OMS los síntomas y signos de este tipo de agotamiento son varios pero destacan:- Síntomas físicos: cefaleas, mareos, dolores de estómago o enfermedades gastrointestinales (colitis, gastritis), rigidez muscular, alteraciones dermatológicas, afectaciones en el sistema locomotor, obesidad, problemas cardiovasculares, entre otros.
- Reducción en el rendimiento laboral, falta de energía
- Agotamiento emocional y mental, cambios en el estado de ánimo, desmotivación, irritabilidad, cansancio físico
- Alienación de las actividades relacionadas con el trabajo: frustración, indiferencia, desinterés, apatía en el trabajo
¿Cómo atenderlo?
Según la OMS, el desgaste laboral responde a varios factores como los efectos que tiene la precariedad laboral y la seguridad en los empleos, que se atenderían con la efectividad de políticas públicas que velen por las personas trabajadoras y sus derechos laborales (tanto para asalariados como para personas que trabajan bajo la denominación del freelance). En el caso de las afectaciones físicas y psicológicas, los profesionales de la salud recomiendan que a nivel individual las personas hagan uso de algunas estrategias, por ejemplo:- Hacer ejercicio
- Llevar una dieta saludable (rica en omega-3, fibra, hortalizas y baja en azúcares y carbohidratos)
- Evitar el consumo de tabaco y alcohol
- Dormir las horas suficientes (8 horas)
- Realizar actividades de esparcimiento
- Terapia y apoyo psicológico
- Técnicas de relajación o actividades enfocadas a la meditación