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Julio Díaz anhela ser el sexto “gran maestro” mexicano de ajedrez

Julio Díaz comenzó sus pasos por el mundo del ajedrez cuando tenía 12 años edad. Ahora, está a punto de ir a la Olimpiada Mundial de Rusia, a finales de julio. ¿Su sueño? Llegar a coronarse como el sexto “gran maestro” de ajedrez. Quiere llegar a ser como Magnus Carlsen, el llamado “Mozart del ajedrez”.

¿Quién es?

Originario de Puebla y con 27 años de edad, Julio Díaz es ajedrecista profesional y campeón nacional. Es maestro por la Federación Internacional de Ajedrez (Fide), miembro del Equipo Olímpico Mexicano y creador de la plataforma Chesseable, para la enseñanza de este deporte. Es fan de Freddie Mercury y Leonardo Di Caprio. Su película favorita “El club de la Pelea” y el libro “El Túnel”, de Ernesto Sabato. Entre sus gustos culinarios están los tacos al pastor, que bien podrían ir acompañados de una cerveza y hasta ¿por qué no?, un pay de queso, para aderezar una buena comida.

Así empezó todo

Julio Díaz platica con Once Noticias sobre el momento en que, desde su infancia, tuvo su primer contacto con el ajedrez, gracias a un primo.
“Básicamente cuando iba en la primaria, mis padres trabajaban y salían como a las seis de la tarde; yo tenía 12 años, y como salía mucho más temprano me iba a casa de mis tíos y pasaba la tarde con mis primos mientras mis papás, Fidel y Susana, se desocupaban. Un día casual, mi primo estaba jugando ajedrez y le pregunté ‘¿qué es eso?’. (Él) me enseñó los movimientos básicos, las reglas”, recuerda.
Días después, en su escuela primaria hubo una convocatoria para competir en ajedrez, “yo levanté la mano y creo que ese primer impulso me ayudó bastante a empezar con un buen resultado”, comenta. Julio se califica como una persona tranquila e introvertida, hasta antes de comenzar a sobresalir en el ajedrez. Estudió diseño multimedia y, en estos momentos, crea contenido para una empresa de ajedrez, calificada como una de las más grandes del mundo. Curiosamente, sus hermanos no han tenido la misma inclinación por este deporte, sólo sus padres se acoplaron más a esa afición.
“Mis papás aprendieron a jugar justamente en esa temporada. Ellos me ayudaron a prepararme; mi papá se acopló al mundillo del ajedrez. Ambos están divorciados y yo convivo más con mi mamá”.
Y las competencias llegaron. Logró superar los torneos municipales, regional, hasta calificar al estatal, “pero ahí ya había mucha gente que ya tenía experiencia en torneos”. “También hice unos (torneos) en olimpiadas nacionales como la sub 20; en la nacional hay un nivel muy diferente cuando juegas contra gente de la edad o universitaria, que cuando juegas con los jugadores de primera fuerza”, señala Julio Díaz.

Los primeros obstáculos

Aunque no fueron dificultades extremas, Julio describe que, al cumplir la mayoría de edad y dejar de jugar en categorías juveniles, fue duro acostumbrarse a las exigencias que torneos más avanzados requerían.
“Hasta que fui agarrando más nivel. Fui acostumbrándome, hasta que en los últimos años, 2018 y 2019, ya se empezaron a dar mucho mejores resultados. En 2020 no jugué nada, no hubo eventos por el tema de la pandemia y, en 2021, ya se me dio el título de nacional de primera fuerza”, destaca.
Efectivamente, en 2021, recibe su título de campeón nacional en ajedrez que viene siendo su primer título de “primera fuerza” porque, antes, había obtenido triunfos en nacionales de categorías de sub 18, sub 20 y de universidades. “Primera fuerza” es la categoría máxima en el ajedrez. Y se clasifica por puntaje rating, es decir, la gente que tiene un rating de menos de mil 500 juega en cuarta fuerza; con más de mil 900, en primera fuerza. Ahí están quienes tienen un título dentro del ajedrez.

¿Qué sueña?

Sin dudarlo, Julio Díaz solo tiene una respuesta, y es que quiere llegar a ser ‘gran maestro´.
“Lo que decía, en el ajedrez hay varios títulos, está el candidato a maestro, el maestro internacional y el gran maestro. Mi meta es lograr el título de gran maestro porque es algo muy difícil. Imagínese que en México solamente hay cinco personas que lo han logrado; en el mundo, menos de mil, en toda la historia. Es algo que me parece especial porque poca gente lo consigue”.

Aclaración sobre petición de fondos

Su pase automático a las olimpiadas en Rusia 2022 lo consiguió tras ser nombrado campeón nacional. Van quienes califican como primer y segundo lugar en el nacional. Equipos varonil y femenil, que están conformados por cuatro titulares y un suplente en cada rama. “La olimpiada es un evento donde van equipos de todos los países, de países pequeños y que quizá no tienen tanta cultura del ajedrez. Y otros como Armenia, Ucrania y Rusia que tienen mucha cultura. Que sea en Rusia (la olimpiada) es especial porque ahí es como la cuna del ajedrez, son más evolucionados (en la rama). La mayoría de los campeones de ajedrez en la historia han sido rusos”, expresa Julio. Precisamente en Twitter, Julio habría subido hace algunos días una campaña donde pedía apoyo para sufragar gastos de un viaje. El mensaje se entendía como que, dicho apoyo debía ser para el viaje a las olimpiadas de Rusia, lo que generó confusión. Sin embargo, Julio aclara que ese no era el mensaje exacto de la petición.
“Esa campaña que lancé con la gente de eSponsor no es para mi viaje a Rusia, de hecho, el viaje lo paga la Federación de Ajedrez. Los fondos que yo solicito, son para tratar de hacer una pretemporada porque la Federación no paga toda la preparación previa. Entonces, estuve buscando por Latinoamérica una serie de torneos que fueran más o menos accesibles y que fueran de bastante buen nivel”, precisa.
Su idea es asistir a algunos eventos antes de pisar Rusia, entre ellos, este fin de semana participó en un torneo iberoamericano en Ciudad de México; después tendrá otros dos más en Chihuahua. Posteriormente, viajará a El Salvador, República Dominicana y, probablemente, Cuba. Díaz se dice muy satisfecho porque la campaña superó las expectativas. “La meta que me había propuesto de cumplió en dos días, incluso, hubo gente que me apoyó por fuera”. El joven Julio Díaz recomienda a quienes deseen iniciarse en la aventura del ajedrez que, “lo vean como un juego; hay quienes lo ven como las matemáticas o algo muy complicado y no lo es; sí, tiene sus reglas, como todo juego, pero eso es, un juego”.
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