La exportación manufacturera en México mejorará lo que queda de 2022 y el próximo 2023, aseguró Alejandro Saldaña, economista en jefe de Grupo Financiero Bx+.
El experto comentó que la expectativa de crecimiento en Estados Unidos y a nivel global tuvo una revisión a la baja la semana pasada, sin embargo, se prevé que la economía norteamericana crezca en el próximo año y medio y con ello la exportación manufacturera de México.
“Aunque la expectativa de crecimiento mundial y en Estados Unidos se revisó a la baja, todavía se espera que la economía norteamericana se expanda arriba de su potencial en 2022 y 2023, lo que apoya al panorama para la exportación manufacturera mexicana. Además, se espera que, en los próximos años, el reacomodo industrial, detonado por la pandemia y el T-MEC, beneficie a la industria en México”, advirtió el economista.
Sin embargo, el panorama aún no es para echar las campanas al vuelo, pues se prevé que continúen las afectaciones debido a la invasión de Rusia en Ucrania y al reciente confinamiento en China debido al rebrote de COVID-19 en semanas anteriores.
“Las restricciones en la producción estarán vigentes en el corto plazo, pues los últimos confinamientos en China y la extensión del conflicto en Ucrania agudizaron la escasez de insumos. Posteriormente y de forma gradual, asumimos que los cuellos de botella irán cediendo”, apuntó Alejandro Saldaña.
Por otra parte, señaló que los bajos niveles de inversión fija bruta serán un limitante para la producción industrial, especialmente en la rama de la construcción, a lo que esperan que permanezca como la industria más rezagada.
Lo anterior, dijo el especialista, va en línea con un entorno de incertidumbre económica mundial por los efectos de las tensiones geopolíticas y del endurecimiento monetario, y el local por las políticas aplicadas a sectores clave, como el energético, así como producto de las presiones inflacionarias y el incremento en las tasas de interés.
Un reporte de Grupo Financiero Bx+ señaló que la industria de la Minería hiló dos lecturas en descenso mensual -6.4%, mientras que los componentes petrolero y no petrolero retrocedieron en esta ocasión, pese al incremento en precios del petróleo y metales.
En el caso de la industria de la construcción registró un crecimiento de 3% anual y 3.7% mensual gracias al repunte en todos sus componentes cómo edificación +4.4%, obra civil +1.7%. No obstante, dice el reporte, se mantiene como la industria más rezagada respecto a niveles pre-pandemia (-8.8%).
La industria de manufactura tuvo un crecimiento de 3.6% anual y un -0.2% mensual. El reporte advirtió que se trata del primer descenso mensual en seis lecturas, pero sigue 1.5% arriba de lo visto a inicios de 2020.
Añadió que el regreso parcial en la industria alimentaria, química y de aparatos eléctricos eclipsaron el primer avance en tres lecturas de la industria de transporte.