Euridice Salgado ha vivido con obesidad desde su infancia. Por años ha sido discriminada, violentada y relegada debido a dicha condición. Incluso los médicos la hicieron sentir culpable por ello.
Ella es médico veterinaria y cuenta cómo ha sido difícil vivir con una enfermedad, como lo es la obesidad, que tiene estigmas y que la sociedad la lleva al punto más alto de la crueldad.
Quienes vivimos con obesidad batallamos mucho porque la gente nos mira como si fuéramos personas sucias, mal vestidas, no podemos entrar en los torniquetes del Metro, y muchas otras situaciones.
Me gusta demostrar que tengo capacidades y que puedo estar incluida independientemente de mi forma corporal. Cuando era adolescente mi mamá me llevó al Instituto de Nutrición, hice dieta, tomé cuanto remedio me dieron. Comía lo mínimo posible, todo lo que decían que me podía servir lo hacía.
En el ISSSTE, a donde también acudía porque mi mamá era maestra, salía regañada porque me decían échale ganas, deja de comer, haz ejercicio. A mi me regañaban como si toda la culpa de la obesidad fuera sólo mía. En mi casa había otras personas con obesidad, pero yo era la que tenía mayor problema. Habrá gente que come como locos y no sube de peso, a mi me daba la impresión de que el otro comía y yo era la que subía de peso.
Mi mamá a los 16 años me llevó al Instituto de Nutrición y el trato era igual, salía regañada, me presionaban, entonces la verdad es que dejé de ir, me sentía atacada.
Empecé a enfermar y no podía moverme, tenía una obesidad mórbida mayor, entonces ya como adulto fui a buscar la ayuda del Instituto de Nutrición, después fui sometida a una cirugía bariátrica. El Instituto ya no me ha soltado de la mano, en los últimos años ha cambiado ya la manera de abordar a un paciente no estigmatizando, sino comprendiendo que necesitamos una ayuda que no sólo se limite a la cirugía, sino hay muchos aspectos más que tenemos que cuidar.
Ahora ya me hicieron sentir que la obesidad no había sido mi elección. Después de que fui operada, el Instituto hizo grupos de ayuda de post operación. Me cayó el veinte de que hay un aspecto importante que estaba descuidando, que era el aspecto mental que se ve influido por el estrés laboral, cargas emocionales, lo que veo en televisión, etcétera.
Entonces estoy cuidando mi alimentación, hago ejercicio, estoy tratando de cubrir la parte médica, nutricional, la parte física y no logro bajar de peso. Pero he aprendido que también está el aspecto mental, que mi sistema nervioso detecta estímulos que van a hacer que secreten hormonas que me mantienen en estado de inflamación. Ahora comprendo que la obesidad es una enfermedad de muchas causas, hay factores que no controlo, en algunos tengo poder, en otros no, debo mantenerme mentalmente sana y no todos los tratamientos son para todos.
El tratamiento debe ser impartido por personal de salud capacitado, individualizado y que sea empático porque yo tengo una historia de vida que me hace perpetuar, o no, este estado.
México tiene una de las tasas de sobrepeso y obesidad más altas del mundo. De acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2021, ambas condiciones afectan en México a 42.9% de la población de 12 a 19 años y a 72.4% de la población de 20 y más años.
El doctor Fernando Pérez Galaz, cirujano gastro bariatra y cofundador de Obesidades, explicó que la obesidad es una enfermedad crónica, compleja, multicausal y progresiva, que resulta de la interacción de factores conductuales, medioambientales, genéticos y metabólicos.
El especialista advirtió que la obesidad es una enfermedad crónica y ascendente en el paso del tiempo. Dijo que en 30 años en México se creció al doble la prevalencia de sobrepeso y obesidad.
“Al ser una enfermedad tan compleja, la obesidad requiere de un tratamiento multidisciplinario, que incluye un estilo de vida saludable con actividad física; un abordaje integrativo cognitivo, psicodinámico y humanista; tratamiento farmacológico con medicamentos innovadores como los agonistas del receptor de GLP-1, fentermina y psicofármacos, y cirugía bariátrica”, aseveró el experto.
Señaló, que por ejemplo, se decía que la prevalencia de sobrepeso y obesidad se daba más en las ciudades, pero hemos observado en los últimos seis años que en donde más se ha visto el incremento en niños y jóvenes es en las zonas rurales. Explicó que están dejando de sembrar, cosechar y consumir sus cultivos, y ahora comen alimentos procesados, lo que genera una repercusión en prevalencia de otras enfermedades como diabetes.
La doctora Verónica Vázquez, psicóloga clínica y presidenta de Obesidades, advirtió que existen diferentes tipos de obesidad, por lo que el diagnóstico debe hacerse entendiendo las causas.
“Para asegurar un tratamiento adecuado, el primer paso es que el paciente acepte su condición y que entienda que existen factores ajenos a su voluntad. Los especialistas debemos saber tratar esta enfermedad y acompañar al paciente. El tratamiento debe centrarse en la persona, considerando aspectos como estilo de vida, alimentación y situación económica. Las respuestas a necesidades tan diversas deben crearse junto con el paciente. Ver cómo se siente y cómo interactúa en los ámbitos familiar, social y laboral es determinante, ya que puede ser discriminado en algunos de estos ámbitos o en todos ellos”, añadió Verónica Vázquez.
La doctora Vázquez informó que Obesidades pone a disposición de los pacientes un localizador de expertos que tratan la obesidad desde diferentes especialidades a través de su sitio www.obesidades.org.