Las hermanas De Velasco son fundadoras y directoras de la Orquesta Sororidad de Ciudad de México. Este proyecto, conformado por 60 instrumentistas y 20 coristas, nació en el año 2020, a raíz del encuentro ‘Tiempo de Mujeres. Festival por la igualdad’.
Josefa y Esperanza De Velasco son las que están detrás de este proyecto y buscan posicionarlo en diversos espacios. Para ellas nada es imposible, por lo que son fieles a sus sueños musicales y saben que el reto consiste en renovarse y enfrentar cualquier obstáculo –la música les ha enseñado que los retos también son derrotas, pero nunca renuncias–.
Las hermanas De Velasco tienen pura frescura y amabilidad para conversar; su mirada y su plena disposición para dar hasta los detalles mínimos, se advierten en los primeros minutos del encuentro con Once Noticias.
La formación de Josefa y Esperanza
Su formación musical y trayectoria es compartida. Las respaldan alrededor de 15 años. Ambas comenzaron a estudiar piano a los 7 años y siguieron el camino musical hasta los estudios universitarios, cuando decidieron estudiar, en la Academia Fermatta, la carrera de composición e ingeniería de audio.
Sin embargo, su camino académico se bifurcó cuando Josefa decidió, a los 20 años, salirse de la academia. Decidió tomar clases particulares, con algunas figuras como Enrique Barrios y Jorge Torres, enfocada en la dirección de orquesta y comenzó a trabajar en un estudio. El objetivo era aventurarse a la música desde otra perspectiva y obtener otros conocimientos.
Durante 4 años tomó clases particulares con Humberto Sánchez Medrano y otros maestros que la apoyaron para continuar su formación hasta que decidió retomar sus estudios en Fomento Musical y decidió enfocarse en la dirección de orquesta.
Por otro lado, Esperanza comparte los mismos recuerdos que su hermana al comenzar en la música y hasta la universidad: “hemos sido guías una de la otra”.
Sin embargo, señala que luego ella fue becaria en Fomento Musical, como directora de orquesta. Ahí tuvo la oportunidad de formarse, al mismo tiempo, en la dirección orquestal y la composición. Gracias a esto obtuvo buenos pilares en la dirección.
El proyecto: Orquesta Sororidad
El proyecto de la orquesta nace, tal como recuerdan las hermanas De Velasco, en ‘Tiempo de Mujeres. Festival por la igualdad’, en el año 2020. Antes de la pandemia en la capital se organizó la segunda edición de este festival, en el marco del Día Internacional de la Mujer, que reunió a artistas, académicas, investigadoras, activistas y deportistas nacionales e internacionales, para que compartieran su trabajo en más de 80 actividades.
“A los integrantes y organizadores del Festival se les ocurrió una muy buena idea: cerrar con una orquesta en la que sólo estuvieran mujeres. Nos hablaron y nos plantearon el proyecto y nos aventuramos a ver si se podía”, recuerda Josefa.
Esperanza comenta que fue un reto muy grande, ya que tuvieron poco tiempo para prepararlo, aunque todo logró salir porque ya tenían los arreglos y contaron con apoyo de la Sala Ollin Yoliztli, para hacer los ensayos.
“Ya habían cosas resueltas, ya nos conocían, teníamos los arreglos, teníamos el trabajo hecho y pudimos hacer que funcionara así”: Esperanza.
Ambas relatan que al escucharse y ver la respuesta al interior, y en el público, las instó para continuar con el proyecto, lo que califican como muy inspirador y motivador.
“La inspiración llegó ya cuando lo hicimos. Somos de la idea que todos los conciertos que hagamos y cómo nos involucremos con la música nos llena mucho más si tiene algún mensaje social y coincide con el momento histórico”, agrega Josefa.
Asimismo, Esperanza afirma, al referirse a la orquesta:
“Es muy poderoso tener enfrente a una orquesta de mujeres que no tienes que decir una clase, no tienes que enseñar nada, sólo con verlas inspiran a que las mujeres puedes hacer lo que quieran y a sonar muy bien musicalmente”.
Las mujeres en la música
Esperanza advierte, al reflexionar sobre el panorama actual de las mujeres en la música, que las mujeres deben continuar abriendo brecha: “lo importante como comunidad es que no haya feminicidios, luego también que una mujer se sienta cómoda en un ambiente donde pueda estudiar y prepararse”.
Josefa, por otro lado, comparte que todavía hace falta visibilizar a las mujeres en la música orquestal. Y es que hace poco tiempo descubrió, en un Simposio de mujeres directoras de orquesta, que hay muchas mujeres que llevan años luchando por tener un lugar en la música:
“No sabíamos de la existencia de estas mujeres, llevan como cuatro años y fue mágico ver a tantas mujeres. No se debería de pelear, por componer música o por buscar que nos den un reconocimiento, llevamos años en esta lucha y debemos seguir haciéndolo, porque a veces las nuevas generaciones no lo saben”.
Los retos sororos
Una de los retos que les ha impuesto el proyecto de la Orquesta Sororidad es que han buscado las formas de hacer que sobreviva, para que puedan llevar su mensaje a otros lugares del país.
Buscan posicionarlo como un proyecto que integre la pasión de todas las mujeres que participan en él, pero también que sea un espacio que otorgue retribuciones justas, para todas, por lo que en la actualidad están en el proceso de hacer una asociación sin fines de lucro. El objetivo es conseguir fondos y que las mujeres pueden obtener un pago por su trabajo.
“Que las mujeres que lo conforman se sientan cómodas de chambear. Queremos hacer las cosas bien y eso tarda. Queremos conseguir apoyos para planear tocar en espacios públicos y no sólo en privados. Mucho de lo que hemos dirigidos son conciertos privados, también como directoras invitadas”, afirma Esperanza.
Durante la pandemia las hermanas de Velasco no han parado y han incursionado, también, en la composición y producción de soundtracks de series en algunas plataformas. Ahí han aprovechado para que la Orquesta Sororidad grabe en estudio.
Las últimas series en las que participaron, fueron: “No fue mi culpa” (2021) y “Las tres muertes de Marisela Escobedo” (2020), en esta última, las intérpretes que participaron fueron integrantes de la Orquesta.
Josefa y Esperanza participan como directoras huésped con la Orquesta Sinfónica del Instituto Politécnico Nacional (OSIPN), en el programa Teoría de Cuerdas, en el marco del Día Internacional de la Mujer, con obras como “La calaca”, de Gabriela Ortiz y “Claro de Luna”, de Gina Enríquez.
Tendrán una presentación este sábado 5 de marzo, a las 13 horas, en el Auditorio del Centro Cultural Jaime Torres Bodet, del IPN; pero si no puede asistir será transmitido el domingo 6 de marzo, por El Once, a las 16:00 horas.
Josefa y Esperanza comparten, como mensaje último a la audiencia de Once Noticias que la música es un mundo retador y que consideran que las mujeres que decidan optar por ella deben persistir y no dejarse desanimar si alguien las desestima. Enfatizan que la música es para todos y todas, y que la vocación aunada al trabajo constante son herramientas fundamentales.