Desde el año 2000, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) proclamó el 21 de febrero como Día Internacional de la Lengua Materna para promover la diversidad lingüística, la educación multilingüe e incentivar en todas las sociedades un mejor conocimiento de las tradiciones culturales.
La lengua materna forma parte de la identidad de cada persona y es importante preservarla, ya que fomentan valores como la tolerancia y el respeto.
En México, además del español, de acuerdo con el Catálogo de las Lenguas Indígenas Nacionales, proyecto del Instituto Nacional de Lenguas Indígenas (Inali), existen 68 lenguas indígenas originarias divididas en más de 350 variantes lingüísticas, y se calcula que más de 7 millones de mexicanos y mexicanas hablan alguna de ellas.
Cada una de las lenguas indígenas está integrada por elementos culturales particulares y su propia mirada del mundo. Algunas de ellas están en riesgo de perderse y actualmente existen diversos esfuerzos para apoyar en su preservación.
Situación actual de las los pueblos y lenguas indígenas en México
Irma Pineda Santiago, poetisa zapoteca, traductora, docente, promotora y defensora de los derechos de los pueblos originarios, fue elegida en 2020 para representar la voz de los pueblos indígenas de toda Latinoamérica y el Caribe en el Foro Permanente sobre cuestiones indígenas de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), para el periodo 2020-2022.
Su función es ser portavoz de las preocupaciones, demandas y propuestas de los pueblos indígenas que pertenecen al sur del continente americano. De acuerdo con Irma Pineda al hablar de avances en esta materia es posible decir que hoy hay mayor difusión de la existencia de las lenguas indígenas.
“A mí me tocó hace 20 años, todavía hace 15 años, que la gente decía –hablas zapoteco, y de dónde es eso, dónde se habla […] Somos un mismo país y la gente no sabe. Veo ahora que hay más difusión, más conocimiento de la existencia de las leguas, eso es algo positivo”.
Para Pineda Santiago, este mayor conocimiento de las lenguas ha permitido que también las instituciones se comprometan más con las culturas indígenas en general. Por ejemplo, para situaciones legales o en los sistemas de salud, ya se requiere intérprete traductor en lenguas indígenas de manera que la persona tenga las herramientas para estar bien atendido.
Asimismo, considera que el papel de los medios de comunicación ha sido fundamental para hacer difusión del trabajo que se hace en las lenguas indígenas: creaciones, libros, materiales audiovisuales o radiofónicos o música como hip hop o rap en lenguas indígenas.
Las redes sociales también están permitiendo, por un lado, que la gente que no es indígena tenga el conocimiento de las culturas, mayor sensibilidad y apertura para escucharlas y vincularse con ellas. A los pueblos indígenas, las plataformas de comunicación les está permitiendo saber que del otro lado también hay gente interesada en ellos.
Sin embargo, para Irma Pineda las lenguas indígenas siguen siendo desplazadas en las comunidades porque la discriminación y el racismo continúan teniendo demasiado peso: “la gente todavía le tiene miedo a ser discriminado por hablar una lengua indígena”.
Cuando los jóvenes migran por la falta de educación en sus comunidades, los propios padres prefieren enseñarles español o inglés, ya que su lengua materna no le servirá afuera. Aunque este tema va más allá de lo lingüístico, tiene que ver con un círculo de carencias en la salud, en las oportunidades de empleo, en el campo, etc.
Cada lengua es un mundo
Así como dice el dicho que “cada cabeza es un mundo”, así todas las lenguas indígenas de nuestro país.
Acogido por instituciones públicas y empresas privadas, el libro “Intraducibles” tiene el objetivo de ofrendar un tributo a los años de resistencia de las y los hablantes de las lenguas indígenas de México. El documento, que es posible descargar de manera virtual, consta de 68 palabras intraducibles en 33 lenguas diferentes, cada una de ellas acompañada de un verso original de la poetisa mexicana Irma Pineda Santiago.
Irma Pineda platicó a El Once que el proyecto “Intraducibles” surgió junto con Gabriela Lavalle, directora de Mexican Cultural & Tourism Institute de Houston, Estados Unidos, revisando el libro “Lost in translation”, el cual contiene palabras de varios lugares e idiomas con un texto en inglés explicando su significado.
“Y a partir de eso, entre mezcal y mezcal, terminamos diciendo por qué no hacemos un libro, pero recuperando las palabras de las distintas lenguas indígenas que hay en México; un libro sólo para México”. Tan sólo en México hay 68 lenguas distintas, podríamos pensar en un libro que contenga al menos una palabra de cada lengua, ese fue el objetivo inicial”, dijo Irma Pineda.
Para la poeta este libro conforma el corpus de la gran herencia de las abuelas y los abuelos, que nos han ido compartiendo a lo largo de los años, “palabras que nos son cercanas, nos son familiares, nos son cotidianas en los pueblos, pero que cuando intentamos decirlas en español resulta que no encontramos una sola palabra para decir lo mismo, entonces tenemos que hacer toda la explicación para intentar que se entiendan porque muchas veces tienen que ver con nuestro propio contexto, con lo espiritual, con lo mítico, con lo mágico, un poco con la historia, con la más antigua religión y entonces no logran ser trasladadas tan fácilmente. Son todo ese cúmulo de sentimientos, de ideas, pero, sobre todo, digo yo, de herencias de las abuelas y los abuelos”, Irma Pineda.
Una vez con la idea empezaron a buscar alianzas estratégicas a las que se sumaron el Instituto de Cultura de Houston (recursos y logística), el Instituto Nacional de Lenguas Indígenas (convocatoria de lenguas), Unesco (convocatoria de ilustraciones) y, más tarde, Santillana, editorial que propuso llegar a niños a través de las escuelas.
Para economizar costos, se pensó en hacer un portal virtual y que las escuelas y el público general pudieran tener acceso digital al libro.
Para Irma Pineda “Intraducibles” es un libro que se volvió entrañable en el sentido real de la palabra: “agarrarlo con las entrañas”, porque vive el corazón de mucha gente, y sobre todo porque la gente que colaboró con sus palabras hizo un ejercicio interesante de ponerse a pensar en la propia lengua qué palabras serían intraducibles.
“Porque estamos tan acostumbrados a esas palabras, yo lo digo porque yo hablo una lengua, que en muchas ocasiones no las pensamos hacia el español […] que los hablantes hagan esta reflexión de su propia lengua debió haber sido un ejercicio muy interesante”, nos platicó Irma.
Selección
Llegaron más de 300 palabras, no de todas las lenguas, ya que hay algunas que se encuentran en situación crítica por tener sólo pocos hablantes y ya de la tercera edad, muchos otros pudieron no haberse enterado de la convocatoria.
Sin embargo, algunas de las personas que participaron mandaron más de una palabra, por tanto, el jurado tuvo que seleccionar de cada lengua qué palabra tendría un mejor efecto y mayor impacto hacia los no hablantes, pues, si bien está hecho por un grupo de diferentes culturas indígenas, “Intraducibles” busca ser una ventana para los no hablantes.
A Irma llegaron las 68 palabras ya seleccionadas y sobre ellas escribió los versos. Trabajó una primera versión, y después entró al proceso editorial con Unesco y Santillana.
¿A quiénes está llegado intraducibles?
Al final del camino, el libro terminó dirigiéndose hacia la infancia. En el caso de las escuelas, según nos platica Irma, es posible saber que sí está llegando a este segmento gracias a las solicitudes y porque maestros y padres de familia escriben para comentar sobre el material.
“Intraducibles” también despertó curiosidad entre el público en general. Esto se puede constatar con las descargas o también durante las presentaciones que se han llevado a cabo, como por ejemplo en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, donde se presentó el libro de manera oficial.
¿Qué tal un “Intraducibles 2”?
De acuerdo con Pineda Santiago, actualmente hay muchas ideas en torno al proyecto. Por ejemplo, hay una propuesta de hacer “Intraducibles” a nivel Latinoamérica, uno para cada lengua de México y uno por país.
“Yo estoy muy feliz por eso, porque un libro ha dado ideas para hacer muchas cosas más. Ahora me ha escrito algunas maestras de diferentes comunidades y me dicen -estoy trabajando con mis niños un libro de intraducibles del pueblo-”, Irma Pineda.
La palabra favorita de “Intraducibles”
Preguntamos a Irma Pineda cuál es su palabra favorita de las 68 que presenta el proyecto de “Intraducibles”:
“Por su significado a mí siempre me ha gustado una palabra en tsotsil, ch’ulel, que tiene que ver con el alma de las personas […] Uno tiene que cuidar muchas cosas para que el ch’ulel no se le escape del cuerpo; cuidarte de no pasar un gran susto, de no enojarte mucho, incluso de no juntarte con gente mala, envidiosa porque eso afecta tu ch’ulel, esa palabra me gusta mucho”.
A propósito del Día Internacional de la Lengua Materna, la poeta Irma Pineda Santiago nos hace una invitación:
“Quiero invitar a la gente a que conozca más a que conozca más de la diversidad cultural, no sólo de México, sino del mundo porque en la medida que conocemos, nos damos cuenta de que en estas culturas que nos resultan diferentes no hay nada que nos agreda o nos afecte. Creo que necesitamos ser más abiertos ante la diferencia para no discriminar, para no excluir”.
Consulta “Intraducibles” y platícanos cuál sería tu palabra preferida. Además, te recomendamos disfrutar de “68 voces, 68 corazones”, una producción de Canal Once.