La pavimentación de un camino rural en San Jerónimo Taviche, ubicado en los valles centrales zapotecos, perteneciente al distrito de Ocotlán, en Oaxaca, así como otras obras públicas, no beneficiará a los habitantes sino al nuevo proyecto minero Monte Albán I, señalan activistas y pobladores de esta región. Hace un mes se inauguró, con la presencia del Gobierno Federal y autoridades estatales, el camino de acceso a San Jerónimo Taviche. El proyecto es parte del programa de Pavimentación de Caminos de Acceso a Cabeceras Municipales 2019-2024, que se aplica en Oaxaca y que tiene por objetivo conectar 209 municipios con tres mil 87.2 kilómetros, con una inversión de 12 mil 693.5 millones de pesos. Esta vía era un viejo camino rural que fue recuperado a través de la pavimentación de una vía que ahora permite un tránsito diario promedio anual de 100 vehículos, a velocidades de 60 kilómetros por hora, tal como informa un comunicado del Gobierno Federal. Esta obra beneficiará, según lo expuso el Gobierno, a mil 750 habitantes de algunas localidades como Guegonivalle, Portillo el Guayabal, Pozo de la Canela y Mina Santa Inés. Tuvo una inversión de 49.45 millones de pesos y entre sus beneficios se resalta la reducción del tiempo de recorrido.
Reactivación de una vieja mina en San Dionisio Ocotlán
En el municipio de San Dionisio Ocotlán se busca reactivar una mina a través del proyecto Mina Monte Albán I. Este proyecto es impulsado por Grupo Albatro HF, SA de CV, quien inició los trámites, desde el pasado 5 de agosto de 2021, para solicitar la aprobación de una Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) ante la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), según la publicación de la Dirección General de Impacto y Riesgo Ambiental DGIRA/0035/21 de la misma entidad. Según el expediente 200A2021MD046, se tiene previsto iniciar actividades de extracción en terrenos ubicadas en los municipios San Dionisio Ocotlán y en San Jerónimo Taviche, y se pretende que abarque 2 mil 640.80 hectáreas. La concesión está registrada en el municipio de Zanatepec, a nombre de María Emilia Lara de la Hoz y cuyo nombre de la empresa que aparece es el de Mina Aurea S.A de C.V; la concesión a persona física data desde 1994. No obstante, Articulación por la Vida contra la Minería del Valle de Ocotlán señala a Once Noticias que ellos se enteraron de este proyecto a través de un medio de comunicación digital independiente, aunque ya sabían de la existencia de la concesión por el proceso de investigación. “Grupo Albatro HF es un ente fantasma”, enfatizan preocupados los activistas. Comparten que hay intentos de acuerdos de esta concesión con una empresa que se llama Aurea Mining, filial de la canadiense Alio Gold. Esta empresa es la concesionaria del proyecto Ana Paula, una mina a cielo abierto de la que se extrae oro y plata en Guerrero. Alio Gold, en 2020, anunció una fusión con Argonaut Gold, otra empresa canadiense que extrae oro.Pavimentación al despojo
A integrantes de la red Articulación por la Vida les preocupa la pavimentación del camino rural que va a Taviche, porque afirman que no beneficiará a pobladores sino al proyecto minero que se pretende reactivar, ya que el boquete de Monte Albán I quedará, así lo estipulan los mapas de la Manifestación de Impacto Ambiental revisados por el medio de comunicación, a unos 50 metros del camino rehabilitado, inaugurado el 29 de noviembre del año pasado. El camino rural comienza en San Dionisio y conecta con San Jerónimo y San Pedro Taviche. Atraviesa varias agencias de Ocotlán. Antes, durante el porfiriato, en ese camino estaban las vías del ferrocarril que transportaba los materiales extraídos de las minas hasta la ciudad de Oaxaca, aseguró uno de los integrantes quien prefirió resguardar el anonimato. Después de la revolución esa vía quedó en abandono aunque ha funcionado en las últimas décadas como un camino rural. A los defensores medioambientales les sorprendió que se retomará esta vía porque Taviche y San Dionisio son los municipios más alejados de Ocotlán, además de que durante mucho tiempo padecieron el abandono de gobiernos anteriores. Empero, con respecto a la mina, no les sorprendió porque ya otras empresas han ido a realizar exploraciones a Taviche.“Hay mucho silencio, por eso denunciamos esto. Semarnat no puede seguir autorizando estos proyectos mineros en el valle si se sabe que la Minera Cuzcatlan ha causado muchas afectaciones al valle”, enfatizan.Y es que Grupo Albatro HF busca reactivar la mina en la misma zona en la que opera la Minera Cuzcatlán, filial de la empresa canadiense Fortuna Silver Mines, quien en octubre de 2018, debido al derrame de una presa de jales contaminó el Arroyo Coyote, un cauce que nace en San José del Progreso –lugar en donde opera la mina– atraviesa a Magdalena y cuatro comunidades hacia abajo –San Pedro Apóstol, San Felipe Apóstol, Tejas de Morelos y la Barda Paso de Piedras–, para después conectarse al Río Atoyac. Desde entonces, las comunidades afectadas, principalmente la de Magdalena Ocotlán han emprendido una lucha para exigir que Semarnat no ceda a la presión, pese a que a finales del año pasado la minera comunicó la autorización de la extensión de la explotación mineral hasta 12 años, sin que hasta ahora Semarnat se haya manifestado al respecto. Articulación por la Vida contra la Minería del Valle de Ocotlán expresa su preocupación porque además la obra pública de alcantarillado de agua pluvial en San Dionisio Ocotlán, inaugurada el 9 de enero, según lo han comunicado medios locales, fue posible con el apoyo de la Minera Cuzcatlán y del ingeniero Pablo Carreño Pérez, por lo que afirman que el camino inaugurado a Taviche y las obras públicas serán beneficio para continuar impulsando la explotación minera.