La reforma energética ocurrida en el sexenio pasado puso en desventaja a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) frente a competidores privados. Por ello, la iniciativa de reforma a la Ley de la Industria Eléctrica del actual Gobierno de México busca nivelar el piso de competencia y eliminar las prácticas que incluso ha calificado de “abusivas”. Al final, la reforma propuesta por el gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador, indica, busca un trato justo y equitativo para los competidores del mercado. Estos son seis beneficios que traerá la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica:
- Eliminación de condiciones asimétricas de competencia. Desaparece la prohibición de comercio intra firma y contratos bilaterales para CFE con la ejecución de contratos de entrega física.
- Modificación en los criterios de despacho que reflejen costos reales de generación, eviten la simulación (costos bajos de renovables) y especulación.
- Eliminación de subsidios y políticas de dumping que favorecen unos competidores (privados) sobre otros (CFE).
- Trato equitativo para emisión de Certificados de Energía Limpia (CELs) entre CFE y particulares.
- Revisión de contratos no rentables para la Nación y el erario público (Productores independientes).
- Eliminación de la simulación y fraude a la ley amparados bajo el régimen de autobasto.