Reportajes especiales

Zimapán: magna obra hidroeléctrica será modernizada de la mano de Andritz

La presa de Zimapán, contemplada por la compañía austriaca para repotencializar su infraestructura, desfogó recientemente causando pérdidas mayores a 6 mmdp

En noviembre, se anunció que la hidroeléctrica austriaca Andritz ganó la licitación que, en conjunto con Generadores Mexicanos, Hydroproject de México y Sistemas de Energía Internacional, tendrá la responsabilidad de potencializar nueve hidroeléctricas de la Comisión Federal de Electricidad (CFE). La firma austriaca obtuvo un contrato que ronda los 893 millones de dólares para cerrar la operación. Entre esas nueve beneficiadas, se halla la central hidroeléctrica Zimapán, ubicada en los límites de los estados de Hidalgo y Querétaro.

Perfil desde la CFE

De acuerdo con un documento oficial de la empresa a cargo de Manuel Barttlet, la Central Hidroeléctrica Ingeniero Fernando Hiriart Balderrama (CH-FHB), perteneciente a la Gerencia Regional de Producción Central, es considerada desde su inicio de operación en 1995, como una instalación estratégica y primordial para el Sistema Eléctrico Nacional. Su capacidad de rápida respuesta en la generación de energía eléctrica. Para la zona central del país es de 5 minutos, de 0 a carga máxima (la más rápida a nivel nacional), y su capacidad de regulación de frecuencia y voltaje, contribuye a la estabilidad del Sistema Interconectado Nacional. La construcción y puesta en operación de la CH-FHB requirió una inversión total de 800 millones de dólares, originando un impacto positivo en la región al abrir grandes posibilidades de desarrollo, generación de empleo, creación de redes de comunicación terrestre, derrama económica e infraestructura de servicio médico. También aprovecha el potencial energético del Río Moctezuma, donde convergen los Ríos Tula y San Juan. La central cuenta con el túnel de conducción de agua para generación más largo del mundo (21 mil 700 metros), y su obra de contención, cortina, la más alta del mundo en su tipo (203 metros), que permite almacenar el agua para generación de energía eléctrica. En cifras:
  • Las principales estructuras conformadoras de energía presentes en esta central hidroeléctrica son: obra de toma, túnel de conducción, tubería a presión en túnel, pozo de oscilación, galería de válvulas, casa de máquinas, equipo electromecánico, galería de transformadores, galería de cables y ventilación, subestación y túnel de desfogue.
  • Después de rigurosos estudios fue seleccionada una cortina de tipo arco bóveda, dadas las características geológicas y topográficas de la boquilla ubicada dentro del cañón de El Infiernillo.
  • Tiene una altura de 203 metros desde el desplante hasta la corona. Ese detalle, en su momento la hizo la más alta en su tipo en México.
  • También ocupó el segundo lugar en altura total de presas (después de Chicoasén) y, en la escala mundial el sexto sitio.
  • En su base, la cortina tiene 22 metros de ancho y en la corona cinco.
  • Sobre esta cortina, fue construido un camino carretero de 130 metros de largo, con dos bandas de circulación, el cual une a poblados ubicados en Cadereyta, Querétaro, y en Zimapán, Hidalgo.
  • A este camino se accede por dos túneles de mil 260 metros de longitud
  • Almacena mil 500 millones de metros cúbicos de agua en 2 mil 300 hectáreas
Aun así, esta obra considerada magnánima con la CFE, ha tenido sus problemas sobre todo, por las lluvias, como el más reciente que llevó a pérdidas para los agricultores y dejó incomunicados a poblados cercanos a la misma.

Riesgo hidráulico que ensombreció Zimapán

La presa de esta hidroeléctrica llegó a su capacidad en septiembre, poniendo en peligro a los pueblos aledaños a su construcción. Por ello, debieron desfogarse 350 metros cúbicos por segundo al Río Moctezuma. El informe oficial arrojó daños que ascendieron a 6 mil 500 millones de pesos, incluyendo más de 30 mil damnificados. Pero las quejas no se hicieron llegar por parte de pobladores de Las Vegas y Las Adjuntas, gente de estrato social humilde y del sector campesino, los más afectados.

La autoridad trabajando

Las autoridades competentes pusieron manos a la obra porque, tanto el gobierno municipal de Zimapán como el Ejército, mantuvieron la aplicación del Plan DN-III-E para implementar una columna de ayuda en beneficio de los pobladores de la comunidad Las Vegas. No obstante, hubo inconformidad.
“Nuestra familia allá en (la comunidad de Las Vegas) perdieron sus cosechas. No es la primera vez que atraviesan algo igual; siempre que hay inundaciones por lluvias, nunca o casi nunca recuperan su cosecha”, dice a Once Noticias, Atanacio López, quien es habitante de Pachuca, Hidalgo, pero que tiene familia en la comunidad de Las Vegas y sabe perfecto lo sucedido a sus hermanos (Sabino y Carmen) quienes son agricultores y conocen el significado de vivir cercanos a la región afectada”.
“Mi hermano (Sabino), tiene sembradíos y la verdad mire usted, la situación es difícil para quienes nos dedicamos a esto y para quienes no tenemos el poder. Sí, mire, como se dijo, vinieron las autoridades a extenderles la mano, porque se dijo que no los soltaran de las manos y se agradece la buena intención; pero no es suficiente. De que pierden, pierden. Tienen familia. La presa siempre es un peligro por los niveles de agua que alcanza, pero ¿qué le hacen? Ahora sí que a ellos (su familia) ahí les tocó vivir, ¿verdad?”, dijo. Una semana después, se registró un derrumbe en inmediaciones del cuarto de máquinas del embalse, cerca de la comunidad de Las Adjuntas. Las autoridades declararon en un comunicado que no se habían registrado lesionados, ni afectaciones al complejo eléctrico. Este medio intentó contactar a la Comisión Nacional del Agua, a fin de conocer los daños y cifras de pérdidas en ese incidente, pero no hubo respuesta.

El lado “recreativo” y optimista de Zimapán

La presa hidroeléctrica, también es considerada un espacio recreativo. Ahí, es posible llevar a cabo actividades como son la pesca deportiva o una caminata por el cañón de las brujas y del epazote, pasando por túneles subterráneos de 120 metros y 650 metros respectivamente. Y un espectáculo asombroso viene a ser el cañón Peña del Águila, que cuenta con mil 200 metros de longitud. Y como todo lugar recreativo, no podían faltar los restaurantes cercanos. Ahí, destacan lugares para degustar mariscos y comida mexicana; cabañas de hospedaje que permiten disfrutar de un buen descanso en cualquier temporada del año. Y también hay visitas guiadas, porque la Presa el Infiernillo se encuentra abierta los 365 días del año. Este es el retrato de Zimapán, una de las nueve hidroeléctricas que, en lo restante del sexenio, se tiene contemplada para repotencializar su imagen e infraestructura.

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