Revolución energética

IMCO: México debe tener competitividad en sector eléctrico

El IMCO señala que la competitividad la vemos como la capacidad de un país de atraer y retener inversiones y talento

Oscar Ocampo, coordinador de energía en el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), habló con Once Noticias sobre la iniciativa de reforma eléctrica, que propuso el Ejecutivo Federal.

¿Qué significa la reforma eléctrica para el sector privado?

Trata de retirar lo que hoy conocemos como el mercado eléctrico mayorista, eso a partir de acciones como eliminar la independencia de operador del mercado, es decir, quitarle la independencia para decidir qué central inyecta su energía a la red y finalmente garantizar, de forma artificial, a Comisión Federal de Electricidad (CFE) 54% de participación en el mercado de la generación eléctrica. Me refiero con artificial, porque la iniciativa pretende que a nivel constitucional ningún productor que no sea la CFE pueda generar más de 46% de electricidad en el mercado. Esto tiene un impacto para los productores privados porque se les está topando la participación del mercado, pero también se les está cancelando los permisos bajo los cuales operan al día de hoy. No queda claro bajo qué modelo contractual van a remplazar estos contratos o permisos. Regular es muy importante porque hoy en día las tarifas son puestas por la Comisión Reguladora de Energía (CRE) y parte de la reforma es que ahora esta comisión pasa a la CFE. Esta podrá establecer sus propias tarifas.

¿Cuáles serán los tipos de regulaciones para las tarifas y contratos?

Lo CFE tendrá la libertad de decir qué centrales y en qué momento inyecta su energía a la red, al desaparecer la independencia del Centro de Nacional de Control de Energía (CENACE), quien actualmente realiza esto, y lo hace partir del mérito económico, es decir, la central que reporte menores costos es la primera que se inyecta en la red. Hoy en día la CRE tiene una metodología definida para establecer las tarifas industriales que todavía están en las partes regulada y comercial. Ahora CFE tendría la libertad de decir las tarifas que pagaríamos todos los consumidores de este país.

¿En qué se traducen estas consecuencias?

Se traducen en posibles litigios que tendría que enfrentar el Estado mexicano por vulnerar los derechos de los inversionistas que apostaron por México en el mercado de las energías renovables. Así que México pierde atractivo como esquema de inversión, a pesar de las múltiples ventajas competitivas y comparativas que tiene este paso, ese es el impacto económico más importante a mediano y largo plazo. Y finalmente vemos un mayor costo de producción industrial a partir de los costos de generación, porque CFE es significativamente más cara que todas sus contrapartes privadas y esa es la electricidad que van a tener que comprar todas las industrias.

¿Qué significa esta reforma para la competitividad en México?

La competitividad la vemos como la capacidad de un país de atraer y retener inversiones y talento. Para la industria se necesita energía confiable a precios competitivos, energía que no vaya a fallar y energía limpia, completamente renovable. Este es un sector indispensable para todos los demás sectores, porque sin energía competitiva no puedes tener una industria competitiva.

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