En una Plaza Valladolid a reventar, inició campaña a la gubernatura del estado, Alfredo Ramírez Bedolla, quien estuvo acompañado del presidente nacional de Morena, Mario Delgado Carrillo y de Raúl Morón Orozco, líder estatal.
El evento, programado para iniciar a las 10:00 de la mañana, inició hasta el mediodía, a pesar de que había gente de Sahuayo, Jiquilpan y otros municipios que llegaron a Morelia a las cinco de la mañana.
Para entrar a la plaza había un cerco sanitario, en donde para pasar por un espacio de menos de un metro, se tenía que franquear una multitud de más de 50 personas esperando ingresar.
Solo se permitía el acceso a invitados especiales, medios de comunicación y vendedores ambulantes de papas, churros, garbanza, algodones de azúcar y raspados.
El cerco estaba conformado de cuatro personas vistiendo un traje blanco de protección sanitaria.
En lugar de un acto de campaña parecía que se iba a ingresar a una zona de peligro, lo cual se comprobaba una vez adentro, ya que en el espacio no había sana distancia, como si la pandemia de COVID-19 no existiera.
Alrededor de las 11:45, llegaron Mario Delgado, Raúl Morón y Alfredo Ramírez acompañados de un contingente de más de 100 personas.
El primero en tomar la palabra fue Pérez Negrón, quien reconoció a Raúl Morón por ser visionario y a Ramírez Bedolla por ser un hombre de partido, de ideales y convicciones arraigadas.
A su vez, el exedil de Morelia dijo que no guarda rencores por la decisión del Instituto Nacional Electoral (INE) y resaltó que eso demuestra que Michoacán merece un cambio profundo.
Además, hizo un llamado para que los michoacanos no se dejen comprar con dádivas.
Qué vale una despensa contra la pensión de adultos mayores, contra las becas jóvenes de bachillerato. las dádivas tienen a un acabarse”, declaró Pérez Negrón.