Ícono del sitio Once Noticias

5 tendencias tecnológicas en servicios de salud para el 2023

Uno de los retos que tendrán los sistemas de salud en 2023 será sumar tecnología a los procesos que permitan mejorar la atención de los pacientes.

Así lo menciona Eduardo Iglesias, CEO Global de VivaWell, quien asegura que la tecnología no es un sustituto, sino una herramienta de ayuda y complemento a los actuales sistemas de salud.

La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) y el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP) informaron que el presupuesto destinado para el sector salud durante el año 2023 será de 892 mil 849 millones de pesos, lo que representa un alza de 4.2% en términos reales, respecto a 2021.

“Este aumento de presupuesto es en función de mejorar y velar por la salud de la población mexicana. Por ello, de cara al 2023, es necesario buscar alternativas que mejoren la forma de aplicar y sobre todo gestionar la salud para cumplir con dicha tarea”, menciona Iglesias.

A continuación las 5 tendencias en las que se debería enfocar el sector salud y la población en 2023.

  1. Gestión de la prevención en lugar de gestión de la enfermedad

En México y América Latina, los sistemas de salud están más orientados a atender la enfermedad que a prevenirla. Es un tema cultural que impacta directamente en las personas. Para cambiar este paradigma, se debe integrar a la salud física un enfoque wellness, y así lograr un cambio real en los hábitos de vida de las personas. Esta integración comienza a verse en ciertas healthtech a nivel global.

        2. Digitalización de la salud

En la actualidad, la atención médica vive una revolución. Un ejemplo son las teleconsultas, las cuales dejaron de ser una alternativa que se popularizó durante la pandemia a ser una conveniente forma de atención. Se estima que alrededor del 80% de las consultas médicas por urgencias no graves pueden resolverse mediante una teleconsulta.

Pero esto es sólo la punta del iceberg. Existen tecnologías especializadas como el EHR (Expediente Médico Digital), capaz de contar con todos los antecedentes médicos de una persona en su teléfono móvil. Esto permite que luego de realizar el diagnóstico médico, se genera la prescripción del medicamento en forma digital y se enlaza con los servicios de envío, para que llegue rápidamente a la casa del paciente sin tener que salir a comprarlo.

        3. Nueva tecnología médica al alcance de la mano

Día a día surgen nuevos dispositivos que permiten a profesionales médicos evaluar a sus pacientes a distancia o en el consultorio. Desde electrocardiogramas realizados con un mini dispositivo con visualización en celular; ecógrafos más simples pero que cumplen la función de los tradicionales; termómetros inteligentes; relojes inteligentes y hasta pulseras para medir la presión arterial, son algunos ejemplos del avance de la tecnología.

Todos los datos que estos dispositivos generan pueden ser analizados por un especialista de la salud con el previo tratamiento de la información.

Se calcula que aproximadamente el 30% del volumen de datos a nivel global es generado por la industria de la salud, de acuerdo con el informe realizado por RCB Capital Market, banco de inversión global. Además, revela que en 2025 el crecimiento del volumen anual de datos será mayor al producido por la industria manufacturera, la financiera y la de entretenimiento, juntas.

        4. Integración de servicios en un mismo lugar

Tanto las personas como las empresas quieren y necesitan facilitar sus procesos de salud con el mejor costo posible. Existen diferentes apps y soluciones, de diverso grado de calidad, pero cada una de ellas provee ciertos servicios. Esto implica tener varios proveedores para poder resolver temáticas de salud.

Integrar es tendencia. Aunque siempre lo fue en otros mercados, en salud es una novedad. Ahora se entiende a la salud como un concepto integral que agrupe la prevención, el wellness y la atención médica, para reunir lo mejor de cada uno con procesos sólidos de automatización, inteligencia artificial, machine learning, análisis predictivo y datos para potencializar lo que se hace en la actualidad.

        5. La tecnología no reemplaza, suma

Existe cierto prejuicio sobre el uso de la tecnología aplicada a la salud, ya que se cree que implica degradar el concepto de atención médica personalizada. Algunas afirmaciones como “las aplicaciones no deben reemplazar a los médicos”, “es mejor una consulta personal que una consulta virtual” o “la inteligencia artificial no puede reemplazar la decisión de un profesional de la salud”, apuntan a pensar que la tecnología reemplazará a la atención médica, sin embargo, no se trata de reemplazar sino de sumar tecnología a la salud.

El debate, no obstante, debería estar enfocado en qué y cómo puede la tecnología generar un paso adelante en la ciencia médica. Para avanzar se necesita consolidar un cambio cultural en todos los actores.

Mucho se hace en la actualidad: los títulos de dirección de innovación, directores de tecnología aplicada o directores de minería de datos, comienzan a aparecer en instituciones médicas de todo el mundo.

El desafío no es enfrentar a la tecnología sino sumarla para avanzar en el desarrollo de una ciencia médica que cuide y mejore la calidad de vida de las personas.

Salir de la versión móvil