
El cáncer cervicouterino es una de las principales causas de mortalidad en mujeres a nivel mundial. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), más del 95% de estos casos están directamente relacionados con infecciones persistentes por el Virus del Papiloma Humano (VPH).
En México, tan sólo en 2022 se registraron más de 10 mil nuevos casos confirmados, lo que lo convierte en el segundo tipo de cáncer más común en mujeres en el país. A nivel mundial, la cifra asciende a más de 600 mil.
Sin embargo, su prevalencia es desigual ya que el 94% de las muertes por este tipo de cáncer ocurre en países de ingresos bajos y medianos, donde el acceso a la prevención y atención médica es limitado.
En México, de acuerdo al INEGI, en 2022 la tasa de mortandad por cáncer cervicouterino fue de 8.90 defunciones por cada 100 mil.
El VPH y su asociación con el cáncer cervicouterino
El VPH es una infección de transmisión sexual común que afecta a una amplia proporción de la población. Existen más de 200 tipos de VPH, de los cuales algunos son considerados de alto riesgo debido a su potencial para provocar cáncer.
La persistencia de estos tipos de VPH de alto riesgo puede llevar al desarrollo de lesiones precancerosas en el cuello uterino, que, si no se detectan y tratan a tiempo, pueden evolucionar no sólo a cáncer cervicouterino, sino también a otros tipos de cáncer como el de vagina, vulva, ano y orofaringe.
Lo anterior da muestra de la importancia de la vacunación contra el VPH, que junto con el uso de métodos de barrera y hábitos saludables, puede marcar una diferencia significativa en la lucha contra el cáncer cervicouterino.
En México, los esfuerzos por prevenir este cáncer se han centrado en la vacunación exclusiva a niñas de quinto grado de primaria y aquellas de 11 años no escolarizadas.
Otro grupo poblacional considerado para este esquema de vacunación agrega a mujeres y hombres cisgénero y transgénero que viven con VIH, así como a adolescentes en protocolos de atención por violación sexual.
Día Mundial de la Prevención del Cáncer del Cuello Uterino
Frente a los retos que implica este tipo de cáncer y su prevención, Marzo es un mes clave para la concientización con la conmemoración del Día Internacional de Concientización de la Infección por VPH y el Día Mundial contra el Cáncer Cervicouterino.
Estas fechas recuerdan la importancia de continuar con la difusión de información, el acceso a vacunas y la eliminación de barreras sociales y económicas que dificultan la prevención. Este cáncer es el único que se puede erradicar.