Sin duda fue invaluable la labor que, durante la pandemia por COVID-19, realizó en Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) al atender a casi 11 millones de pacientes con enfermedad respiratoria viral, de los cuales casi 7 millones fueron casos sospechosos no confirmados y cerca de 3 millones resultaron positivos al coronavirus.
Tras el levantamiento de la emergencia sanitaria emitida recientemente por el Gobierno de México, la institución hizo un balance.
La titular de la Coordinación de Vigilancia Epidemiológica, Xóchitl Refugio Romero, informó que del 1º de febrero de 2020 al 5 de mayo de 2023, de los más de 3 millones de personas confirmadas con COVID-19 poco más de 377 mil requirieron hospitalización. Además, 140 mil de los pacientes atendidos no contaban con seguridad social.
Durante esta emergencia sanitaria, destacó, el IMSS demostró un gran liderazgo, capacidad de respuesta, coordinación y apoyo inter e intrainstitucional para contar con los recursos necesarios para atender a la población.
Medidas preventivas
Sin embargo, llamó a mantener las medidas preventivas, ya que se trata de una enfermedad endémica, un fenómeno similar a la influenza.
No por el hecho de que se quite la emergencia internacional no debamos de cuidarnos, al contrario hay que mantener las medidas preventivas que hasta hoy hemos implementado: el uso de tapabocas dentro de lugares cerrados y conglomerados sigue siendo de gran importancia, sobre todo para la población más vulnerable como son personas que tienen enfermedades crónico-degenerativas, embarazadas, personas inmunodeprimidas, etcétera”, dijo.
Finalmente, dijo que para los servicios de salud se debe continuar una vigilancia epidemiológica activa que permita detectar amenazas y actuar de manera oportuna. “La presencia o posible presencia de futuras amenazas, como fue en su momento el virus SARS-CoV-2, la influenza, exigen al Instituto tener un sistema de vigilancia epidemiológica y de monitoreo lo más acercado a lo que sería en tiempo real”.