La granada proviene de un árbol llamado granado, perteneciente a la familia de las Punicáceas que alcanza entre 2 y 6 metros de altura, con tallos muy ramificados, hojas alargadas y flores repletas de estambre.
Es originaria de Persia, Irán y el Himalaya Occidental, y se cree que fue en Puebla donde se adaptaron los primeros cultivos, siendo el municipio de Tehuacán en donde estuvo una amplia zona productora.
La planta fue traída a México por misioneros españoles y encontró su desarrollo comercial adaptándose a las regiones Centro Norte y Centro del país, donde se encuentra el clima que más le conviene: subtropical y tropical.
La granada tiene una cáscara gruesa de color escarlata o dorado, en cuyo interior aparecen múltiples semillas rojas empapadas de una pulpa jugosa, refrescante y de sabor agridulce; se adapta bien fuera de las regiones subtropicales, siempre y cuando las temperaturas no sean muy bajas.
Simbolismos y atribuciones culturales
La granada es mencionada en el mito griego de Perséfone y en la Biblia, además de ser considerada un símbolo de amor y fertilidad en la Edad Media.
La fruta, como simbolismo, ha tenido importantes atribuciones como el de la castidad, de la resurrección en el cristianismo; de hecho en España llegó a ser tan famosa que formó parte de obras reales, pero en México es el símbolo de la sangre de los independentistas.
Producción en México
Según datos de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), durante 2021 México tuvo una producción a nivel nacional de más de 8 mil toneladas, cultivada en 17 estados, donde destacan:
- Morelos con una producción de mil 622 toneladas.
- Hidalgo con una producción de mil 466 toneladas.
- Oaxaca con una producción de mil 326 toneladas.
- Guanajuato con una producción de mil 155 toneladas.
Su temporada abarca desde julio hasta principios de octubre, pero es en septiembre donde se convierte en un distintivo claro de la temporada otoñal y las festividades patrias adornando los deliciosos chiles en nogada, aunque también puede consumirse desgranada en vaso con chile y limón, en jugo o simplemente fresco como fruta de mesa.
Beneficios de la granada
La granada goza de una serie de propiedades que la convierten en una súper fruta, entre los que destaca su gran poder antioxidante que ayuda a frenar el proceso de envejecimiento y a mantener la piel sana.
Los beneficios que encontramos en esta fruta son variados, pero de manera especial tienen relevancia la presencia de potasio, vitamina A, vitamina C y vitamina B9; minerales como el magnesio, el calcio, el selenio, el fósforo, el cobre, el sodio, el zinc y el hierro.
Por otra parte, al desgranarla para su consumo en fresco puede resultar una actividad divertida y entretenida para los más pequeños, reduce la presión y alegra el corazón, pero también la podemos consumir en jugo y acompañando ensaladas.
