La deficiencia de hierro, que provoca anemia, afecta a un cuarto de la población en el mundo, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), pero en México el 40% de la población presenta esta condición.
“Es un panorama preocupante porque se estima que el 40% de la población mexicana tiene deficiencia de hierro, la mayoría van a desarrollar en su momento anemia con todas las complicaciones que existen”, explicó el jefe del servicio de hematología del Hospital Regional de Alta Especialidad de Ixtapaluca, Álvaro Cabrera García.
La falta de hierro afecta a 3 de cada 10 mexicanas, y a 4 de cada 10 embarazadas. Las alertas se encienden para este sector de la población porque al nacer el bebé puede tener alteraciones de memoria y retraso en el desarrollo neurológico.
“Por supuesto que los recién nacidos pueden nacer con deficiencia de hierro, no quiere decir hereditario porque no es cuestión de algo genético sino mas bien porque a la mamá le faltó”, agregó Cabrera García.
Las causas pueden ser por menstruaciones abundantes o prolongadas; problemas para absorber el hierro, aumento de la demanda de hierro: puede ocurrir durante el crecimiento, la lactancia o el embarazo, entre otros.
Los síntomas que padecen las pueden ser debilidad, ahogo, palidez y fatiga.
“Cuando hago ejercicio no puedo porque me fatigo, me duele la cabeza y me comienzo a marear, las manos las tengo frías regularmente y me cuesta trabajo entrar en calor y me dicen que mi tez es muy pálida. Desde la adolescencia me diagnosticaron anemia, y me hicieron estudios y salí muy baja de hierro”, relató Osiris López, una paciente de 33 años que padece deficiencia de hierro.
¿Qué es el hierro?
El hierro es un mineral que se encuentra en cada célula del cuerpo. Se considera un mineral esencial debido a que se necesita para producir hemoglobina, una parte de las células sanguíneas.
Este 26 de noviembre en el Día Mundial de la Deficiencia de Hierro, especialistas hicieron un llamado para que la población se realicé cada seis meses estudios de laboratorio, para ayudar a identificar los niveles de hierro en la sangre.
El experto concluyó que este padecimiento es curable y controlable; su tratamiento es oral y tiene un alto grado de efectividad.