Diciembre es un mes de fiesta y celebraciones, en donde las personas suelen acompañarse de pirotecnia y juegos artificiales, pero con ella aumentan los riesgos de padecer quemaduras de primero, segundo o tercer grado.
De acuerdo con un estudio practicado por el Hospital Manuel Gea González, ubicado al sur de Ciudad de México, existe un incremento de 30% de casos por quemaduras en la piel como consecuencia del uso de la pólvora durante las festividades, aseguró Rossana Janina Llergo Valdéz, presidenta de la Fundación Mexicana para la Dermatología.
A diferencia de otros meses, como enero y septiembre, en donde se reportan 23% y 20% de accidentes, respectivamente, la cifra es mayor en el mes de diciembre y se asocian al uso de pirotecnia.
“Diciembre es en donde existe una mayor cantidad de accidentes asociados a la pirotecnia. Hay datos del Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred) que nos dicen que hay un incremento de un 300% de quemaduras ocasionadas por juegos pirotécnicos y en donde el grupo de riesgo más afectado, principalmente, son menores entre 5 y 14 años de edad”, dijo Janina Llergo Valdéz.
La dermatóloga detalló que las partes del cuerpo más afectadas por quemaduras son las manos, dedos, cara y ojos. Agregó que estas lesiones pueden ser catalogadas como un problema de salud pública, asociado a una costumbre arraigada en la sociedad mexicana.
Quemaduras y su tratamiento
La presidenta de la Asociación Mexicana para la Dermatología señalo que para atender las quemaduras por primer o segundo grado es necesario retirar la ropa que contenga restos de pólvora.
“Si vemos enrojecimiento, hay ardor, dolor importante, lo primero que vamos a hacer es alejar aquello que genera la quemadura. Hay que limpiar la zona y lavar la zona quemada con agua fría o agua templada, nunca helada. Si se tiene alguna crema que contenga hidrocortisona la aplicamos o alguna vaselina y vamos a cubrir el área quemada y siempre será conveniente visitar al dermatólogo”, dijo.
Al mismo tiempo, pidió evitar colocar remedios caseros o la automedicación, ya que podría incrementar padecimientos negativos como cicatrices permanentes, mismas que pueden limitar la movilidad en la zona de la quemadura.
Además, llamo a las personas a acudir a los servicios de urgencias si se presenta una quemadura de tercer grado que deje expuestos músculos o el hueso.
Por último, Llergo hizo un llamado a infantes, adolescentes y a los adultos, para evitar el uso de la pirotecnia con la finalidad de prevenir accidentes.
“La recomendación principal sería evitar los juegos pirotécnicos definitivamente, porque representa un riesgo, aunque se haga bajo supervisión de un adulto. En caso de llevarse a cabo tiene que ser siempre bajo la supervisión de un adulto, pero esto no lo exenta de tener algún tipo de accidente. La recomendación es evitarla”, concluyó.