La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, rechazó las críticas según las cuales la UE habría tardado demasiado en concluir los acuerdos de pedidos de vacunas con las empresas farmacéuticas.
Las dificultades en el suministro de vacunas contra el covid-19 en Europa están relacionadas con el hecho de que “existe una escasez mundial de componentes importantes para la fabricación de vacunas”, aseguró en una nota en el periódico Frankfurter Allgemeine Sonntagszeitung.
Si todos hubiéramos sido conscientes en aquel momento de los riesgos que conlleva el lanzamiento de tal producción masiva, entonces habríamos moderado las expectativas de una vacunación rápida”, dijo, al reconocer que este problema resultaba “doloroso” debido a las grandes expectativas de los europeos.
Sus palabras se producen en plena oleada de críticas en Europa por la lentitud de la campaña de vacunación iniciada después de Navidad, y el cansancio de los ciudadanos tras meses de restricciones.
Von der Leyen, quien recibió el apoyo de la canciller alemana Angela Merkel y del presidente francés Emmanuel Macron, aseguró que la decisión de los países del bloque de pedir dosis juntos era “la correcta”.
Y agregó que la Unión Europea se enfrentaría sin duda a nuevos problemas debido a la aparición de variantes del virus.
Nos preocupamos por estas mutaciones”, advirtió, aunque “afortunadamente” todos los indicios muestran hasta ahora que “nuestras vacunas son igualmente eficaces contra estas variantes”.
Debemos desde hoy prepararnos para un escenario donde el virus no podrá ser suficientemente destruido con las actuales vacunas”, alertó.
Bruselas trabaja por lo tanto “sin demora” con “la industria y la ciencia” para “desarrollar, autorizar y producir vacunas contra las futuras variantes”, concluyó Von der Leyen.