La Organización Mundial de la Salud (OMS) llamó este viernes a tomar medidas “urgentes” para contener la propagación de la viruela del mono en Europa, donde los casos se triplicaron en las últimas dos semanas.
En un comunicado, el director regional de la organización sanitaria, Hans Kluge, pidió a los países europeos que “aumenten sus esfuerzos en las próximas semanas y meses para evitar que la viruela del mono se instale en una zona geográfica más amplia”.
“Es imperativa una acción urgente y coordinada si queremos cambiar la tendencia en la carrera contra la difusión de la enfermedad”, consideró el director de la OMS Europa.
Según los últimos datos del organismo de la ONU, Europa contabiliza en este brote unos 4 mil 500 casos de viruela del mono, el triple que a mediados de junio. Ese número corresponde a 90% de los registrados en todo el mundo desde mediados de mayo, empezó a señalarse en Europa.
La viruela del mono fue identificada en humanos en 1970 y es considerada menos peligrosa que la viruela, de la misma familia, erradicada en 1980.
El sábado, los expertos de la OMS consideraron que la explosión de casos suponía una amenaza sanitaria cuya evolución era muy preocupante, pero sin alcanzar de momento el estado de emergencia sanitaria mundial.
En Europa hay ya 31 países o territorios que notificaron casos de viruela del mono. El Reino Unido es el país europeo con mayor número de casos registrados hasta ahora con mil 076). Le siguen Alemania (838), España (736), Portugal (365) y Francia (350).
El médico jefe de salud pública de Londres, Kevin Fenton, instó el jueves a cualquier persona que tenga los síntomas de la viruela del mono a no participar en la marcha del Orgullo prevista este fin de semana en la capital británica.
Alrededor de 99% de casos de esta enfermedad, que se transmite por un contacto muy cercano, se ha registrado actualmente en hombres de entre 20 y 40 años que mayoritariamente tienen sexo con otros hombres, según la OMS.
La agencia de la ONU recomendó a los países que intensifiquen su vigilancia, sobre todo la secuenciación de la enfermedad, y que se doten de los medios para diagnosticarla y reaccionar rápidamente.
La OMS también animó a los países a poner en marcha campañas de comunicación dirigidas a los grupos principalmente afectados y al público en general.